Atómica: Envuelve la reacción por fisión, en la cual un neutrón choca contra el núcleo de un átomo, partiéndolo en dos y liberando energía nuclear. También conocida como bomba-A. Los reactores nucleares usan la fisión para producir electricidad. Estados Unidos lanzó bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, Japón en 1945 para poner fin a la II Guerra Mundial.
Hidrógeno: Envuelve la reacción por fusión, en la cual dos núcleos chocan para formar otro núcleo nuevo. También conocida como bomba termonuclear o bomba-H. El sol y las estrellas producen energía por procesos de fusión. Las reacciones por fusión permiten explosiones masivas que se multiplican, resultando en una explosión mil veces más poderosa que una bomba atómica.
Comparación: La bomba atómica lanzada sobre Hiroshima produjo una explosión equivalente a 13.000 toneladas de TNT. "Ivy Mike", la primera prueba termonuclear, se llevó a cabo en el atolón Enewetak en las Islas Marshal en 1952 y produjo una explosión equivalente a 10,4 millones de toneladas de TNT.