Una operación montada por el Servicio de Alguaciles de Estados Unidos, conocida como Operación North Star II, resultó en la captura de más de 800 fugitivos señalados por graves delitos como violaciones, agresiones, robos y otros.
“Los resultados de esta operación deben dejar en claro que el Departamento de Justicia y nuestros socios en todo el país no se detendrán ante nada para encontrar y llevar ante la justicia a los responsables de delitos violentos”, dijo el secretario de Justicia de EEUU, Merrick Garland, al ser citado en un comunicado del Departamento de Justicia el lunes.
Se trata de la Operación North Star, Estrella del Norte en castellano. La redada duró alrededor de un mes y permitió capturar a delincuentes que se habían dado a la fuga y operaban en diez ciudades estadounidenses: Albuquerque, en Nuevo México; Búfalo, Nueva York; Cleveland y Columbus, Ohio; Detroit, Michigan; Jackson, Misisipi; Kansas City, Misuri; Milwaukee, Wisconsin; y Oakland, California; así como Puerto Rico.
Entre los capturados aparece Edwin Padilla-López, quien fue encontrado el 3 de febrero en Carolina, Puerto Rico, y “era buscado por conspiración para distribuir sustancias controladas en los municipios de Caguas, Cidra y Aguas Buenas”.
También fue capturado uno de los hombres que había sido considerado como uno de los más peligrosos de los últimos tiempos, Antonio Jenkins. El prófugo fue detenido en Wisconsin, y era buscado por posesión de un arma de fuego y por la venta y uso de una ametralladora.
El trabajo, según informa el Departamento de Justicia, se llevó a cabo en coordinación con diversas agencias locales, estatales y federales de Estados Unidos.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.
