Después de las elecciones primarias del martes en New Hampshire, los candidatos a la presidencia de Estados Unidos centran su atención en la próxima primaria que tendrá lugar más adelante este mes en Carolina del Sur.
La votación en el llamado “primero en el sur” ayudará a reducir aún más el campo de candidatos, que ya tiene solo dos entre los demócratas, mientras que entre los republicanos se ha achicado significativamente después de la elección en New Hampshire.
Los residentes de Carolina del Sur votarán en dos sábados consecutivos, el 20 de febrero lo harán los republicanos y el 27 de febrero los demócratas.
Iowa y New Hampshire produjeron diferentes ganadores y perdedores en ambos partidos. Se anticipa que Carolina del Sur identifique al más probable candidato a la nominación presidencial en cada partido.
Tras haber derrotado con una clara ventaja a Hillary Clinton en New Hampshire, Bernie Sanders busca solidificar su victoria y el miércoles visitó comunidades de bajos ingresos en Nueva York.
Pero Hillary Clinton tiene un fuerte apoyo en Carolina del Sur y está trabajando para conservarlo.
“Hemos aprendido que lo que importa no es si te tumbaron, es que te levantes de nuevo”, dijo Clinton.
El republicano Ted Cruz no pudo repetir su sorpresiva victoria lograda en Iowa en el nororiental estado de New Hampshire, donde el multimillonario Donald Trump reafirmó claramente su posición de favorito. Y algunos analistas dicen que Trump probablemente gane en Carolina del Sur.
Pero Trump ganó un nuevo rival en el gobernador de Ohio, John Kasich, quien está entusiasmado después de lograr el segundo lugar en New Hampshire y podría ser más aceptado por los líderes partidarios.
El bajo apoyo obtenido en New Hampshire forzó a dos republicanos a abandonar su campaña por la Casa Blanca, el gobernador de New Jersey, Chris Christie, y la exejecutiva empresarial Carly Fiorina.
El senador por Florida Marco Rubio no ha renunciado al impulso recibido en Iowa. El exgobernador de Florida Jeb Bush no logró progreso en las dos votaciones previas, pero tiene el apoyo de poderosos donantes y una familia que incluye dos expresidentes.