La oposición de Nicaragua ha calificado como “exitosa” la reunión virtual sostenida días atrás con el diplomático estadounidense Michael Kozak, justo en el momento en se atraviesa una crisis interna dentro de la llamada Coalición Nacional
Kozak se reunió con tres importantes organizaciones de la sociedad civil, dos de ellas conformadas durante el calor de las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega a mediados abril del 2018: La Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia; la Unidad Nacional Azul y Blanco y el Movimiento Campesino.
“Fue un mensaje a partidos políticos”
En la reunión de Kozak no participaron los partidos políticos tradicionales, los cuales no gozan de la simpatía de la mayoría de la ciudadanía, según detallan diferentes encuestas nacionales e internacionales como Borge y Asociados y Cid Gallup.
El presidente de la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua, Mario Arana valora que la exclusión de las agrupaciones partidarias a dicha reunión fue un claro mensaje del gobierno de Estados Unidos.
“Esto significó un respaldo a lo nuevo, a lo que emerge a partir de abril de 2018. Una sociedad civil comprometida con las libertades, democracia y derechos humanos, sin duda es un espaldarazo; pero también un mensaje a los partidos políticos que se alineen de la mejor manera posible”, sostiene Arana en entrevista con la VOA.
La oposición de Nicaragua, aglutinada en la Coalición Nacional, se encuentra en conflicto luego de que el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), señalado por sus adversarios de haber pactado con Daniel Ortega en comicios pasados, enviara una misiva de forma unilateral al Secretario General de la OEA, Luis Almagro.
En la misiva el PLC sugiere a Almagro respaldar el bipartidismo en Nicaragua, una decisión que fue considerada por la oposición como una violación a los estatus internos de la organización. Los estatutos establecen que para enviar propuestas a organizaciones internacionales debe contar con el consenso de todas las organizaciones que integran la Coalición Nacional.
La reunión con el diplomático estadounidense sería la segunda del año. La primera fue a mediados de enero, cuando el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, sostuvo un encuentro con los opositores en Costa Rica. El jefe de la diplomacia estadounidense puntualizó en ese entonces que Nicaragua tenía uno de los pocos “regímenes autoritarios en la región” y resaltó la importancia de la unidad de la disidencia para poner fin a más de 13 años de gobierno sandinista.
El empresario Mario Arana, presidente de la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (AMCHAM) detalló a la Voz de América que la reunión con Michael Kozak fue una continuación de la sostenida anteriormente en enero con Pompeo. “Se habló entre otras cosas, de el estado de la institucionalidad en el país”.
Kozak, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental interino del Departamento de Estado de los Estados Unidos, mostró su interés en conocer las propuestas de la oposición y los problemas que enfrentan para concertar la unidad. Asimismo, la forma en que, se elegirá en su momento a los candidatos para los comicios presidenciales, según Arana.
“Le explicamos los problemas y desafíos en el proceso (de unidad) y lo que hacemos para avanzar. También el hecho de que no hay ninguna señal para reformar el marco electoral, pero bueno se deberá seguir continuando en ejercer todas las presiones para que eso ocurra y discutimos hacia el futuro, reafirmar continuar trabajando estos valores democráticos”, expresó el empresario.
Por su parte Medardo Mairena, representante del Movimiento Campesino, quien también participó de la reunión con Kozak, señaló que expusieron al alto funcionario, las constantes violación a los derechos humanos y civiles por parte del gobierno de Daniel Ortega.
Entre de los puntos más importante que Kozak mencionó fue que Estados Unidos continúa respaldando una transición “pacífica y democrática en Nicaragua” pero, añadió que esto se logrará “deponiendo los intereses de cada uno” de los dirigentes políticos, detalló Mairena.
“EEUU dijo que continuará presionando a este régimen para que pueda haber reformas transparentes y elecciones limpias en 2021. También, recalcó la importancia de crear una oposición robusta”, aseveró el líder campesino.
Miguel Rosales, miembro del PLC, dijo a la VOA que su partido “seguirá comprometido con la Coalición Nacional para que se garanticen reformas consensuadas”, pero pidió al resto de organizaciones opositoras agilizar el debate de este tema. “Exhortamos y urgimos a la Coalición Nacional para que se integre lo más pronto posible la Comisión Política de Trabajo Interna para que, empiece el trabajo de presentar una reforma a la Ley Electoral. Ya el tiempo apremia”, advirtió Rosales.
El exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Edgar Parrales, considera que la reunión entre el funcionario estadounidense y la oposición, también fue un mensaje positivo y de respaldo al país, pero coincide con Arana sobre el hermetismo alrededor de los partidos políticos tradicionales. “Queda demostrado que los Estados Unidos ven con énfasis a los organismos de la sociedad civil, porque los partidos políticos han tenido vaivenes y borrascas, y el peligro es que por su política, estilo de actuar quieran hegemonizar a la Coalición Nacional, por eso Kozak previene a los comparecientes”, valoró Parrales en entrevista con la VOA.
“Sería volver a más de lo mismo”, añade el exdiplomático nicaragüense, en caso de que los partidos políticos pertenecientes a la Coalición Nacional tomen el control de la oposición.
Hasta el momento, el gobierno del presidente Daniel Ortega no se ha pronunciado sobre la reunión virtual entre sus adversarios políticos y el alto funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos. A inicios del año, el presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras, anunció que durante el trabajo legislativo del 2020, el parlamento discutiría una serie de reformas electorales de cara a los comicios generales del año 2021, pero hasta el momento no han anunciado ningún avance.