El presidente salvadoreño, Nayib Bukele ha afirmado que el país no está experimentado “una segunda ola epidemiológica” de covid-19, pese a un incremento reciente en los casos en las últimas semanas, cuando se lleva a cabo un plan de recuperación económica.
"Aparentemente estamos fuera de la alerta de una segunda ola epidemiológica, por ahora", señaló el mandatario a través de su cuenta de Twitter.
De acuerdo con la actualización de Bukele sobre la pandemia, después de efectuarse la toma de pruebas de COVID-19 entre pobladores de la zona oriental y occidental del país, se descubrió un incremento en los casos diarios registrados del nuevo coronavirus entre el 8 y 14 de octubre pasado. Sin embargo, después de esas fechas, el número de casos diarios muestran "una baja sostenida" entre el 15 y el 19 de octubre.
Un día antes del que se reporta la disminución de casos, el Gobierno anunció la implementación de un cerco sanitario en el municipio de Chalchuapa, en el occidente del país, aduciendo que se había encontrado datos “alarmante(s), no visto desde el pico de la pandemia”.
Otro dato que Bukele resaltó en su cuenta de Twitter, sin precisar cifras, es que "ha bajado la ocupación hospitalaria" por el virus.
En un comunicado de prensa emitido por el portal web de la presidencia, se cita al mandatario resaltando que la información aún es “prematura”, y que de acuerdo con la lógica del comportamiento epidemiológico, se puede interpretar que “la tendencia al alza sostenida será una realidad, tarde o temprano, pero tener datos a la baja y un comportamiento hospitalario así, nos dice que una segunda ola no es inminente”.
El presidente Bukele afirmó que evitar una segunda ola epidemiológica dependerá del cumplimiento de “las medidas y de una atención temprana de los casos".
Horas después de la actualización del estado de la COVID-19 en El Salvador, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID por sus siglas en inglés), dio a conocer que junto a la cancillería salvadoreña desarrollan un proyecto que tiene como objetivo brindar apoyo a cerca de 32.300 salvadoreños afectados por la pandemia y las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal.
Según cifras de la Universidad Johns Hopkins, hasta el 20 de octubre, El Salvador registraba 31.975 casos confirmados de COVID-19 y 929 personas fallecidas.