Cuando solo falta procesar el 20% de las actas, el sistema oficial de resultados preliminares del Tribunal Supremo Electoral de El Salvador indicaba que el Partido Nuevas Ideas, de Bukele, y su aliado Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA) se encaminaban a obtener los dos tercios de los 84 escaños posibles.
Unos 5,3 millones de salvadoreños estaban habilitados para emitir el voto. Autoridades estiman que participó cerca del 50% de los salvadoreños aptos para votar el domingo. Los elegidos ocuparán cargos de diputados y alcaldes para un período de tres años, en una jornada marcada por extensas filas por las estrictas medidas de seguridad sanitarias por el coronavirus.
Sin embargo, esto representa un aumento en comparación al 45,73 % de participación que hubo en las legislativas de 2018. El dato fue proporcionado por la presidenta del Tribunal Supremo Electoral, Dora Martínez.
De mantenerse esta tendencia, el presidente Bukele alcanzaría el control en el Congreso no solo para promover una reforma constitucional que ya está en estudio, sino también para eligir a funcionarios de segundo grado entre ellos a 5 de 15 magistrados de la Corte Suprema de Justicia.
La tendencia hasta ahora indica que Nuevas Ideas es el vencedor de las elecciones legislativas y municipales de 2021 en El Salvador. Mientras que los partidos tradicionales ARENA y el FMLN quedarían reducidos a un mínimo de participación electoral.
Bukele publicó un vídeo en Twitter de una eventual celebración con fuegos artificiales: “Victoria”, decía el mensaje.
La encuestadora CID Gallup publicó un sondeo a boca de urna de la elección para la Asamblea Legislativa que le daba a Nuevas Ideas 53 de los 84 curules. Las encuestas también auguran que el oficialismo obtendría 150 de las 262 alcaldías en juego.
Bukele no apareció en las boletas, pero la figura del líder de 39 años fue dominante en la campaña y todas las encuestas vaticinan que su Partido Nuevas Ideas obtendría en las urnas el control del Congreso de 84 escaños y 150 de las 262 alcaldías en juego. El mandatario ha culpado al Congreso de bloquear sus esfuerzos en todo, desde el control del crimen hasta el manejo de la pandemia del nuevo coronavirus.
Los opositores han advertido que la democracia en el país centroamericano está en peligro por lo que consideran una forma autoritaria de gobernar del popular mandatario salvadoreño.
El Tribunal Supremo Electoral abrió un expediente al presidente Bukele, por considerar que el mandatario violó el silencio electoral, al pedir a la población que saliera a votar para relizar lo que él denominó “La operación remate contra la oposición”.
El encargado de Negocios de la embajada de Estados Unidos en El Salvador, Brendan O'Brien, pidió paciencia a los actores políticos hasta confirmar los resultados.
“Lo que nosotros queremos ver es paciencia en el proceso, a veces los resultados toman tiempo, es igual en muchas elecciones”, dijo el diplomático estadounidense.
La jornada electoral tuvo ciertas irregularidades, según dijo María Eugenia Vidal, jefa de la misión de observadores del la Organización de Estados Americanos (OEA).
“Hubo demoras en la apertura en algunos lugares por distintas razones, también recibimos alguna información de dificultad con las credenciales”, expuso Vidal.
[Karla Arévalo y Nery Mabel Reyes contribuyeron a este informe desde El Salvador]