El equipo de defensa de Joaquín “El Chapo” Guzmán, incluyendo sus abogados, investigadores y traductores, serán sometidos a una revisión de antecedentes para asegurase que no sean miembros del cartel de Sinaloa y tengan acceso a pruebas confidenciales.
La orden fue emitida por el juez de la corte federal de Brooklyn, Brian Cogan, encargado de procesar a "El Chapo", tras una solicitud de los fiscales Robert Capers y Arthur Wyatt.
Los fiscales aducen que "si un abogado o investigador extranjero que también fuera un miembro del cartel de Sinaloa se uniera al equipo defensor, éste podría viajar a Estados Unidos, revisar las pruebas que están protegidas y viajar después fuera de Estados Unidos con esos conocimientos".
Agregaron que "por ejemplo, si un miembro del cartel viajara a Estados Unidos y conociera la identidad de un testigo colaborador mexicano podría después viajar a México con esa información y dar el nombre del testigo a otros miembros del cartel de Sinaloa que podrían secuestrar o matar a la familia de ese testigo".
El juez determinó que ese riesgo es "significativo" debido al historial de Guzmán de contratar a especialistas para expandir su negocio de tráfico de drogas.
Los abogados de oficio de Guzmán, Michael Schneider y Michelle Gelernt, criticaron la propuesta y la consideraron una "prohibición" a la entrada de extranjeros a su equipo. De igual forma, la fiscalía y los abogados de Guzmán se enfrentaron por las condiciones de confinamiento del acusado, que de acuerdo con sus defensores le provoca alucinaciones con música.
Estados Unidos acusa a Guzmán de encabezar un imperio de tráfico de drogas, brutalidad y corrupción. La defensa dice que no hay pruebas de que "El Chapo" haya cometido algún acto ilegal. El mexicano fue extraditado a Estados Unidos el 19 de enero.
Una moción de la defensa interpuesta la semana pasada solicita a Cogan que ordene que se libere a Guzmán del ala de ultra máxima seguridad de la prisión de Manhattan en la que también se encuentran sospechosos de terrorismo y mafiosos, y que se le permita integrarse a la población general de reclusos donde pueda recibir más visitas.
El gobierno respondió al argumentar que las duras condiciones - conocidas como Medidas Administrativas Especiales (SAM por sus iniciales en inglés) - son adecuadas para alguien que escapó dos veces de prisión en México.
Los fiscales alegan que incluso cuando estuvo detenido en México, Guzmán utilizaba mensajes codificados, sobornos y otros medios para mantener el control del cartel de Sinaloa y organizar sus escapes.
"Si existe un caso que requiera de SAMs es este", dijeron los fiscales.
Desde que fue extraditado en enero, el Chapo ha estado encerrado en una celda sin ventanas 23 horas al día, solo acompañado de una radio, de acuerdo a documentos de la defensa.
Se espera que Guzmán comparezca de nuevo en la corte en mayo.