China prometió construir una vía férrea que enlazará Brasil y Perú, un complejo siderúrgico e invertir enormes cifras de dinero en los sectores comerciales, financieros y de infraestructuras, durante la visita del primer ministro chino, Li Kequiang a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.
"Debemos actualizar la relación entre América latina y China", señaló Li en el Palacio del Planalto. "A largo plazo, no podemos imaginar que América latina sólo sea un abastecedor de materias primas para China y que China siga siendo una fábrica de productos baratos para América latina", resaltó.
Después de Brasil, Li Kequiang va a Colombia, Perú y Chile como parte de su gira latinoamericana en la que China busca afirmar sus alianzas y ganar poder e influencia en el hemisferio occidental.
En Brasil, la chequera sin límite de los chinos alcanzará para nuevos acuerdos de colaboración y préstamos a la estatal petrolera Petrobras, por valor de $6.290 millones, una línea de créditos por $4.000 millones de dólares para la minera Vale, la compra de ocho barcos que transporten hierro de Brasil hacia China, la obtención de 22 aviones de Embraer para la aeorlínea Tianjin por valor de $1.100 millones de dólares y una treintena de acuerdos más.
El proyecto estrella es la línea férrea que será construida con capital chino, la cual atravesará Brasil de oeste a este, pasando por los Andes hasta llegar a los puertos peruanos.
En el ámbito bancario, se creó una alianza entre el Banco Industrial y Comercial de China (ICBC) y la Caixa Económica Federal (CEF) para financiar proyectos de infraestructura en Brasil a futuro, además de que, en una transacción de unos 172 millones de dólares, el Banco de Comunicaciones de China (BoCom) adquirió el 80% del brasileño BBM y se convirtió así en el primer banco estatal chino en controlar una institución financiera en Brasil.
Kequiang inciará el jueve su visita oficial a Colombia, la primera al país de un funcionario chino de ese nivel.