El ministro marroquí del Interior Taieb Cherkauoi informó que las autoridades han encontrado cinco cuerpos calcinados en un banco que fue incendiado durante violentas protestas contra el gobierno.
Las autoridades recuperaron los cuerpos de las víctimas en la norteña ciudad de Al-Hoceima tras varios actos violentos que tuvieron lugar el domingo 20 de febrero (2011).
Los manifestantes exigen reformas políticas que limiten el poder del rey Mohammed, similar a las protestas en otras naciones árabes.
Las autoridades culpan a los manifestantes del incendio en el banco, según indicó el funcionario, quien informó también que por lo menos 128 personas, en su mayoría miembros de las fuerzas de seguridad, resultaron heridas durante las manifestaciones en varias ciudades de Marruecos.
Señaló que se calcula que unos 37.000 marroquíes participaron en las protestas, de los cuales 120 fueron arrestados por vandalismo y por crear problemas durante las demostraciones.
Se produjeron incidentes similares en Marrakech, la capital, y Larache, donde jóvenes atacaron edificios públicos, sobre todo un puesto de gendarmería y un puesto de aduanas, según varios testigos.