Las redes sociales estallaron el lunes con divertidas menciones, pero también con indignación y duros calificativos para el alcalde de una pequeña ciudad andina, en Ecuador, que el fin de semana declaró ciudadano honorífico al presidente de Corea del Norte, Kim Jong Un por su contribución a la paz mundial.
Por si fuera poco, Ramsés Torres, el alcalde de Guaranda, también quiere hacer lo mismo con el primer mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, y de Corea del Sur, Moon Jae-In.
En su cuenta de Twitter, Torres justificó su decisión aduciendo que "debemos contribuir a construir la paz mundial, nuestro reconocimiento a todos aquellos seres humanos que la posibilitan en favor de la humanidad".
La declaración honorífica quedó para la posteridad en una placa entregada al embajador norcoreano en Ecuador, Hyon Chol.
La placa, entre otras cosas, señala que otorga "el título de ciudadano honorario a tan insigne personalidad de Corea en reconocimiento de admiración y hermandad con el pueblo coreano y su revolución... en testimonio de hospitalidad de aprecio de Guaranda que aspira continuar estrechando lazos".
Los mensajes en las redes sociales iban desde "Kim Jon-Un llamó de emergencia a su consejo de gobierno para ubicar dónde queda Guaranda", a "Trump tiene como prioridad en su agenda ir personalmente a recoger su placa en Guaranda".
Un usuario de Twitter hizo alusión a los globos de goma llenos de agua (bombas) que se lanzan a las personas en carnaval, una costumbre que perdura en Guaranda, aunque ha disminuido en el resto de Ecuador.
Sin embargo, la mayor parte de usuarios de las redes se expresan con dureza e indignación aduciendo las reiteradas y recientes amenazas nucleares del líder norcoreano.
La AP llamó a Torres y al municipio, pero no obtuvo ninguna respuesta.
Una de las primeras voces de rechazo provino de Galo Vásconez del Salto, dirigente de la Cámara de Turismo de la ciudad, quien dijo que tal declaración se ha dado "en forma personal y no representa el pensamiento ni sentimiento de los guarandeños".
Guaranda, que queda 165 kilómetros al suroeste de Quito, es un valle en el centro de Ecuador, capital de la provincia de Bolívar, en la cordillera de los Andes. Es un área agrícola que sirve a varias comunidades indígenas.
Es conocida en Ecuador por su desenfrenado festejo del carnaval en donde prima la comida, el licor y el lanzamiento de agua fría a propios y extraños.
Con información de AP
