La convención marco de Naciones Unidas sobre el cambio climático (UNFCCC) fue galardonada con el premio Princesa de Asturias de Cooperación, por sus más de dos décadas de trabajo para reducir la influencia humana en el aumento de temperatura de la Tierra.
La convención tiene como principal objetivo estabilizar las emisiones de gases de efecto invernadero. En diciembre de 2015, 195 países alcanzaron un acuerdo en París para contener el cambio climático al reemplazar los combustibles fósiles por energías menos contaminantes para el año 2100.
El jurado destacó la importancia de este acuerdo en la cooperación internacional "como un proyecto de futuro para ayudar a todos los países a avanzar juntos hacia un modelo más limpio y sostenible".
El acuerdo incluye el ambicioso objetivo de contener el aumento de las temperaturas a "muy por debajo" de 2 los grados Celsius de los niveles preindustriales, un umbral que según científicos podría ser un punto de inflexión para el clima.
Para que entre en vigor, al menos 55 naciones que representen el 55 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero deben ratificar el pacto.
El premio se entregará en una ceremonia en otoño en Oviedo presidida por los reyes de España.