Los productores cafeteros de Colombia inician hoy su tercer día paro que ha degenerado en violentos disturbios en varias zonas del país suramericano.
El cierre de vías ha sido la principal manifestación de los cafeteros que protestan por lo que la fuerza antimotines de la Policía Nacional ha intervenido para recuperar la movilidad en los corredores viales.
Los cafeteros reclaman más garantías para la producción. Las variaciones a la baja del precio del grano en el mercado internacional han golpeado las finanzas del sector primario de la economía colombiana.
Entre las peticiones de los productores cafeteros están la refinanciación de las deudas de los campesinos y la no importación de café.
Desde 2010, el gobierno ha invertido unos $2.721 millones de dólares en apoyos directos y créditos subsidiados a los cafeteros, pero los precios internacionales, el invierno, las plagas y la devaluación del peso han empobrecido a los campesinos.
El representante de la ONU en Colombia, Bruno Moro, pidió al Gobierno colombiano y a los caficultores que se sienten a negociar. "No hay otra salida. En todas las circunstancias la solución es el diálogo para llegar a un entendimiento", dijo Moro en Bogotá.
Agregó que "cada uno tiene que dar un poco y cada uno tiene que obtener un poco".
Por su parte el Ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, denunció la intervención directa de la guerrilla de las FARC en la protesta. El funcionario dijo que el cierre de vías es la peor fórmula para buscar soluciones.
Los cafeteros piden la renuncia inmediata del gerente de la Federación de Cafeteros de Colombia, Luis Genaro Muñoz.
Muñoz llamó a la calma y a la serenidad para encontrar soluciones a esta situación “que es muy delicada”, dijo.
Los disturbios han dejado al menos 50 heridos y una mujer murió cuando la ambulancia en la que transportaban no pudo pasar por el cierre en la carretera Panamericana que conduce a Popayán en el suroccidente de Colombia.
Hay concentraciones de campesinos en el centro, sur, occidente y oriente del país.
El cierre de vías ha sido la principal manifestación de los cafeteros que protestan por lo que la fuerza antimotines de la Policía Nacional ha intervenido para recuperar la movilidad en los corredores viales.
Los cafeteros reclaman más garantías para la producción. Las variaciones a la baja del precio del grano en el mercado internacional han golpeado las finanzas del sector primario de la economía colombiana.
Entre las peticiones de los productores cafeteros están la refinanciación de las deudas de los campesinos y la no importación de café.
Desde 2010, el gobierno ha invertido unos $2.721 millones de dólares en apoyos directos y créditos subsidiados a los cafeteros, pero los precios internacionales, el invierno, las plagas y la devaluación del peso han empobrecido a los campesinos.
El representante de la ONU en Colombia, Bruno Moro, pidió al Gobierno colombiano y a los caficultores que se sienten a negociar. "No hay otra salida. En todas las circunstancias la solución es el diálogo para llegar a un entendimiento", dijo Moro en Bogotá.
Agregó que "cada uno tiene que dar un poco y cada uno tiene que obtener un poco".
Por su parte el Ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo, denunció la intervención directa de la guerrilla de las FARC en la protesta. El funcionario dijo que el cierre de vías es la peor fórmula para buscar soluciones.
Los cafeteros piden la renuncia inmediata del gerente de la Federación de Cafeteros de Colombia, Luis Genaro Muñoz.
Muñoz llamó a la calma y a la serenidad para encontrar soluciones a esta situación “que es muy delicada”, dijo.
Los disturbios han dejado al menos 50 heridos y una mujer murió cuando la ambulancia en la que transportaban no pudo pasar por el cierre en la carretera Panamericana que conduce a Popayán en el suroccidente de Colombia.
Hay concentraciones de campesinos en el centro, sur, occidente y oriente del país.