Congresistas estadounidenses se mostraron dispuestos a trabajar de manera bipartidista mientras se cumplan los acuerdos firmados en Barbados por el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición de Venezuela, y expresaron respaldo a la aspirante presidencial opositora, María Corina Machado.
“Un mensaje muy claro a la Casa Blanca, estamos dispuestos a trabajar de una manera bipartidista mientras se mantenga el compromiso de Barbados, mientras que se mantenga la presión de la Casa Blanca al régimen de Maduro, que tiene que hacer lo que prometió y que tiene que permitir elecciones libres”, aseguró este miércoles la congresista republicana María Elvira Salazar.
“No estamos dispuestos a negociar ni a dar un ápice en contra de esa idea”, reiteró Salazar tras asegurar que no hay diferencias entre los partidos “cuando se trata de buscar la libertad de Venezuela y hacer responsable a Maduro de lo que acordó”.
Machado, elegida con más del 90 % de los votos como candidata presidencial en la primaria de la oposición celebrada en octubre, participó este miércoles en una mesa redonda de la Subcomisión para el Hemisferio Occidental de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, en la que fue consultada sobre varios temas relacionados con la situación política en Venezuela.
En la sesión, además de Salazar, intervinieron los congresistas republicanos Bill Huizenga, Kieth Self, Mario Diaz-Balart y el demócrata Joaquín Castro.
Machado, quien manifestó que el gobierno venezolano está en su momento “más débil”, insistió en denunciar que hubo una violación de los acuerdos sobre garantías electorales firmados en Barbados, pero afirmó que áún hay tiempo para reanudar el proceso.
Mientras tanto, reiteró que siguen uniendo esfuerzos para organizar a los ciudadanos para las elecciones presidenciales, cuya fecha todavía no ha sido anunciada.
“Esto no es el derecho de una persona, es el de 30 millones de venezolanos a vivir en libertad", expuso la venezolana. "Logramos conseguir un liderazgo con legitimidad, sabemos que ahora nos toca la parte más difícil, pero vamos a crear todas las condiciones para que Maduro entienda que su mejor opción es negociar una transición a través de unas elecciones limpias”
La aspirante opositora aseguró que mantiene contacto directo con Washington y con los gobiernos de otros países, de los que dijo estar recibiendo “mucho apoyo” en medio de la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de ratificar su inhabilitación para ejercer cargos públicos, lo que ha sido condenado por varios gobiernos.
Esta semana el Parlamento de mayoría oficialista inició consultas con diversos sectores de la sociedad civil venezolana, entre ellos aspirantes presidenciales considerados afines al gobierno, para definir una propuesta de calendario electoral que será presentada al Poder Electoral, organismo encargado de hacer la convocatoria a comicios.
El acuerdo de Barbados firmado en octubre por el gobierno y la Plataforma Unitaria de la oposición, prevé que las elecciones sean celebradas en el segundo semestre del 2024.
Tras la firma del acuerdo, EEUU emitió licencias que alivian de manera temporal las sanciones sobre el sector del petróleo y gas venezolano.
Sin embargo, tras el anuncio del TSJ, la Casa Blanca dijo que no renovará las licencias que alivian las sanciones al sector energético de Venezuela cuando expiren en abril si el gobierno de Maduro no honra sus compromisos.
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