Negociadores en la Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos alcanzaron un acuerdo sobre un presupuesto de $1,1 billones de dólares para el gobierno federal hasta septiembre, lo que potencialmente evita otro cierre gubernamental.
El acuerdo fue anunciado el lunes en una declaración conjunta por parte de la senadora demócrata Barbara Mikulski, presidenta de la Comisión de Apropiación del Senado, y el representante republicano Harold Rogers, su contraparte en la Cámara, dominada por los republicanos.
El detallado plan de gastos es resultado de un acuerdo alcanzado en diciembre entre la Cámara y el Senado que daría fondos al gobierno federal por los próximos dos años.
De igual manera elimina los recortes profundos en el gasto conocidos como “secuestro de fondos” que afectaron programas tanto domésticos como militares.
Tampoco incluye fondos para los proyectos del tren de alta velocidad que apoya Obama ni el dinero suficiente para cumplir los compromisos de Estados Unidos con el Fondo Monetario Internacional.
La medida incluye $92.000 millones de dólares extra para las operaciones militares en el exterior, la mayor parte para la guerra en Afganistán.
El acuerdo fue logrado tras un cierre gubernamental de 16 días en octubre.
El acuerdo fue anunciado el lunes en una declaración conjunta por parte de la senadora demócrata Barbara Mikulski, presidenta de la Comisión de Apropiación del Senado, y el representante republicano Harold Rogers, su contraparte en la Cámara, dominada por los republicanos.
El detallado plan de gastos es resultado de un acuerdo alcanzado en diciembre entre la Cámara y el Senado que daría fondos al gobierno federal por los próximos dos años.
De igual manera elimina los recortes profundos en el gasto conocidos como “secuestro de fondos” que afectaron programas tanto domésticos como militares.
Tampoco incluye fondos para los proyectos del tren de alta velocidad que apoya Obama ni el dinero suficiente para cumplir los compromisos de Estados Unidos con el Fondo Monetario Internacional.
La medida incluye $92.000 millones de dólares extra para las operaciones militares en el exterior, la mayor parte para la guerra en Afganistán.
El acuerdo fue logrado tras un cierre gubernamental de 16 días en octubre.