El gobierno peruano ha revocado dos controversiales leyes sobre el uso de la tierra que recientemente generaron enfrentamientos entre la policía y manifestantes en la región amazónica y dejaron decenas de muertos.
Los legisladores votaron, el jueves, para anular las leyes que grupos indígenas dicen amenazarían su forma de vida al abrir la selva amazónica a las compañías petroleras y mineras extranjeras y otros intereses comerciales.
Las comunidades indígenas han estado en conflicto con el gobierno, en relación al tema, durante los pasados dos meses.
Manifestantes bloquearon calles y vías acuáticas para exigir la anulación de las leyes. Sangrientos enfrentamientos estallaron después que la policía trató de despejar el bloqueo de calles por parte de miles de manifestantes indígenas.
Los disturbios conforman la peor violencia política que ha enfrentado el presidente peruano, Alan García, desde que asumió el cargo hace tres años.
La situación es comparada con las batallas en las décadas de los 80 y 90 entre el gobierno y el grupo rebelde maoísta Sendero Luminoso.