La jueza de la Corte Suprema, Ruth Bader Ginsburg, pidió disculpas por las expresiones críticas al candidato republicano Donald Trump a quien lo llamó “farsante’.
“Reflexionando, mis recientes comentarios en respuesta a preguntas de la prensa, estas fueron desafortunadas y me arrepiento de haberlas hecho”, dijo Ginsburg en un comunicado.
“Los jueces deberíamos abstenernos de comentar sobre un candidato a un cargo público. En el futuro seré más prudente”, prometió.
La jueza habló con tres medios diferentes a principios de la semana y dijo que no quería “ni imaginarse” lo que podría ser la presidencia con Trump.
“No hay consistencia en él —dijo del magnate. Dice lo que se le viene a la cabeza en el momento. Tiene un ego… ¿Cómo ha hecho para no presentar sus declaraciones de impuestos? La prensa parece tratarlo muy bien sobre eso”, dijo.
Sendos editoriales en los periódicos The Washington Post y New York Times criticaron su actitud y la calificaron de arriesgada para un juez.
Por su parte, Trump pidió la renuncia de Ginsburg y dijo que la cabeza de ella “no le funciona bien”.
Ginsburg es una de las principales voces liberales de la Corte Suprema de Justicia. Durante sus años en ese Tribunal, Ginsburg ha votado a favor del derecho al aborto. Además, ha votado en contra de la pena de muerte y a favor de los derechos de las mujeres y de los homosexuales.
