La caída en picada del multimillonario de las criptomonedas, Sam Bankman-Fried con su empresa FTX, ha puesto a temblar al sector de las criptodivisas cuyos efectos no logran vaticinar los expertos más versados del sector.
Sólo pueden predecir que el hecho que FTX no lograra pagar los 6.000 millones de dólares solicitados para retiros urgentes de sus clientes, que la empujaran al abismo, es señal del riesgo para otros operadores. Esta compañía era una de las dos principales casas de cambio de criptomonedas.
El efecto dominó siguió este lunes con la quiebra de BlockFi, quien se acogió también al Capitulo 11 de la Ley de Bancarrotas de Estados Unidos, que le ofrece al igual que a FTX poner a un equipo de peritos para reorganizar sus finanzas, recibir un plan –aprobado por un juez- para liquidar sus deudas con sus clientes con lo que encuentren de valor en la compañía, mientras siguen operando.
“Todavía no hemos visto la dimensión del contagio” ha dicho a medios de comunicación Francesco Melpignano, director general de Kadena Eco, una empresa especializada en blockchain, un sistema diseñado para navegar en todas las plataformas y revisar las transacciones realizadas con los criptoactivos.
Este experto ha comparado la quiebra de FTX con la debacle de Lehman Brothers, en septiembre de 2008, que sembró el pánico en los mercados, arrastró a otros bancos y generó el pinchón de la burbuja inmobiliaria que hundió a Estados Unidos y la mayor parte de las economías del planeta en una profunda recesión.
Los expertos siguen de cerca a al menos cuatro empresas del sector de criptodivisas independientes o con conexiones con FTX, entre estas la francesa Coinhouse, que al igual que otras bajo observación, ha creado en los últimos días un corralito para evitar la fuga de divisas, al restringir las operaciones de criptomonedas, lo que mostraría el grado de incertidumbre en el sector.
En una entrevista con Wall Streel Journal la directora financiera de Coinbase, Alesia Haas, dijo que el negocio de las criptomonedas no corre peligro en su totalidad, pero que la quiebra de la compañía mayoritaria sí es considerable y mucho mayor a la caída a mediados de 2022 de la Celsius que generó la primera avalancha del sector.
¿Quiebra de empresas de criptomonedas impacta la economía en general?
Las criptomonedas pregonan el concepto de finanzas descentralizadas y fuera del control de gobiernos o entidades tradicionales, por lo que ningún banco central las avala y pone garantía a su valor, tampoco es responsable de las pérdidas, ya que estas son el riesgo que asume el inversionista sin un paracaídas en caso de que la empresa salga mal, según explican los expertos.
En escenarios como el actual advierten que los clientes de estas empresas no tienen garantizado ningún fondo de devolución en una quiebra, excepto acudir a reclamos del valor de los criptoactivos por vía judicial, lo que puede demorar largo tiempo.
El proceso es muy diferente a los bancos del sistema financiero que se rigen por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) que en caso de bancarrota están obligados a devolver todo o parte de los ahorros de los clientes, con tope de montos distintos en cada país.
Bajo esa perspectiva la quiebra de empresas del criptodivisas sólo afecta a ese sector, diferente a un colapso del sistema financiero tradicional donde sí están entrelazadas sus operaciones con gobiernos y los motores de la economía convencional.
¿Cómo impactaría este panorama al bitcóin?
Las antenas de CoinDesk y otros medios especializados en criptomonedas apuntan a éstas después que el fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, dijera: “Me siento profundamente arrepentido de lo que ocurrió. Siento todo lo que le ha pasado y le ha ocurrido a los clientes”.
El bitcóin que el martes flutúo en 16.512 dólares, según el Coinmarketcap, se mantiene estancado y muy por debajo del valor máximo alcanzado hace un año de 68.500.
Estos medios vigilan ahora a dos de las principales casas de cambio de bitcóin y otras criptomonedas, que estaban relacionadas con FTX, Genesis es una de estas y también Grayscale, ambas del grupo de empresas del inversor Barry Silbert.
Según el medio sudamericano especializado en economía, El Cronista, el fondo de bitcoines depositados en Grayscale Bitcoin Trust (GBTC) es la mayor cuantía en todo el sistema, por lo que el seismo podría llegar también a esas arcas.
“El problema radica en que, más allá de los inversores específicos de la compañía, se trata de la organización con más BTC bajo su resguardo en el mundo, según se sabe. Posee más de 622.000 BTC en sus reservas, y tienen más del 3% del suministro total de bitcoines”, publicó El Cronista.
La bancarrota de FTX, y la drástica baja de las criptomonedas más importantes es notoria, según este medio, con lo que crece la desconfianza en los inversores, lo que podría generar un “sombrío panorama” en Grayscale, como ya oscurece a Genesis, que también resguarda otro fondo de bitcoines.
En ese sentido, cabe preguntarse “cuáles podrían ser las consecuencias de colapsar el fondo que da exposición a grandes compañías al mundo de las criptomonedas”, ha preguntado El Cronista.
Una investigación de la agencia France Press apunta a un “efecto dominó que afecta a todo el sector”, pues las empresas han creado un tejido de intercambios como ejemplo “Genesis entregó criptomonedas a Alameda, un fondo de FTX”.
¿Qué hace el gobierno de El Salvador ante estancamiento del bitcóin?
La semana pasada el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, que hizo del bitcóin moneda oficial del país centroamericano en septiembre de 2021, creo la Oficina Nacional del Bitcóin, cuyo Decreto Ejecutivo 49 publicado en el Diario Oficial la define como una oficina con autonomía funcional y técnica, pero regida por el mandatario.
"Créase la Oficina Nacional del Bitcoin, en adelante 'Oficina del Bitcóin', como una unidad administrativa especializada, con autonomía funcional y técnica dentro de la Presidencia de la República, que actuará bajo los lineamientos directos del Presidente de la República", establece el artículo 1 del decreto.
Medios locales consignan que el mandatario salvadoreño ha comprado con fondos públicos una cartera de 2.281 bitcoines, por los que en su momento pagó unos 106 millones de dólares, pero que en la actualidad sólo valen 39 millones; aunque no existen informes financieros ni auditoría de la Corte de Cuentas de la República, ente contralor del Estado, que den certeza a la información difundida en redes sociales por el mandatario.
La presidencia salvadoreña dice que el decreto firmado por Bukele y la ministra de Turismo, Morena Valdez, en ausencia de la titular de Economía, Maria Luisa Hayem, toca a esta nueva oficina del aparato de Estado “diseñar, diagnosticar, planificar, programar, coordinar, dar seguimiento, medir, analizar y evaluar planes, programas y proyectos relacionados al Bitcóin".
La Oficina del Bitcóin también deberá actuar “solidariamente” con otros países en asistencia y colaboración en cuanto al tema de la criptomoneda oficial del país.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.
