Los analistas estadounidenses aseguran que los 16 días de cierre parcial del gobierno le costó a la economía del país miles de millones de dólares y que la incertidumbre sobre las acciones del gobierno podrían perjudicar aún más a la economía.
El impacto económico del cierre del gobierno aún no ha sido evaluado en su totalidad y las estimaciones varían.
La calificadora de crédito Standard & Poor’s sostiene que la crisis política que derivó en el cierre del gobierno le costó a la economía estadounidense al menos $24 mil millones dólares y además redujo la tasa de crecimiento económico del país.
Otra empresa de investigación, Macroeconomic Advisers, estima que la paralización le costó a Estads Unidos alrededor de $12 mil millones de dólares.
Entre los efectos del cierre se cuentan los salarios atrasados de los funcionarios del gobierno federal, además de otra serie de efectos, lo cual fue señalado incluso por el presidente Barack Obama.
En tal sentido, James Glassman, el economista jefe de JPMorgan, la mayor entidad bancaria del país, dijo a la Voz de América (VOA) que “probablemente el mayor impacto es la incertidumbre que ha creado en todo el país en las empresas que tienen contratos con el gobierno".
El acuerdo logrado en Washington sólo cubre los gastos del gobierno hasta el 15 de enero y extiende la autoridad de endeudamiento del gobierno hasta el 7 de febrero, lo cual según Standard & Poor’s, es un plazo muy corto y la posibilidad de otra crisis política en pocos meses podría pesar sobre la confianza de los consumidores durante la temporada de compras navideñas en noviembre y diciembre.
El economista Joel Prakken de Macroeconomic Advisers, criticó el hecho de que Estados Unidos ha pasado de una crisis financiera a otra en los últimos años, lo cual le viene costando al país alrededor de un punto porcentual de crecimiento económico anual desde finales de 2009.
Prakken atribuye las disputas sobre el presupuesto a un profundo debate y desacuerdo sobre el papel del gobierno en la vida de los estadounidenses, sobre cual debería ser el tamaño del gobierno y que es lo que debería hacer.
El impacto económico del cierre del gobierno aún no ha sido evaluado en su totalidad y las estimaciones varían.
La calificadora de crédito Standard & Poor’s sostiene que la crisis política que derivó en el cierre del gobierno le costó a la economía estadounidense al menos $24 mil millones dólares y además redujo la tasa de crecimiento económico del país.
Otra empresa de investigación, Macroeconomic Advisers, estima que la paralización le costó a Estads Unidos alrededor de $12 mil millones de dólares.
Entre los efectos del cierre se cuentan los salarios atrasados de los funcionarios del gobierno federal, además de otra serie de efectos, lo cual fue señalado incluso por el presidente Barack Obama.
En tal sentido, James Glassman, el economista jefe de JPMorgan, la mayor entidad bancaria del país, dijo a la Voz de América (VOA) que “probablemente el mayor impacto es la incertidumbre que ha creado en todo el país en las empresas que tienen contratos con el gobierno".
El acuerdo logrado en Washington sólo cubre los gastos del gobierno hasta el 15 de enero y extiende la autoridad de endeudamiento del gobierno hasta el 7 de febrero, lo cual según Standard & Poor’s, es un plazo muy corto y la posibilidad de otra crisis política en pocos meses podría pesar sobre la confianza de los consumidores durante la temporada de compras navideñas en noviembre y diciembre.
El economista Joel Prakken de Macroeconomic Advisers, criticó el hecho de que Estados Unidos ha pasado de una crisis financiera a otra en los últimos años, lo cual le viene costando al país alrededor de un punto porcentual de crecimiento económico anual desde finales de 2009.
Prakken atribuye las disputas sobre el presupuesto a un profundo debate y desacuerdo sobre el papel del gobierno en la vida de los estadounidenses, sobre cual debería ser el tamaño del gobierno y que es lo que debería hacer.