El sector agrícola estadounidense sería uno de los mayores beneficiados con la normalización de las relaciones diplomáticas y comerciales con Cuba.
Por lo mismo, lanzaron una coalición nacional para empujar el fin del embargo comercial a la isla.
Tom Vilsack, secretario de Agricultura, dijo en el lanzamiento de la Coalición Agrícola de EE.UU. para Cuba que las oportunidades para ampliar el acceso a los productos estadunidenses en la isla son reales.
"Los cambios políticos anunciados por el presidente Obama permitirán que los productos estadounidenses sean más competitivos, lo que facilitará que el pueblo cubano tenga más opciones de compra en sus tiendas y ampliar la base de clientes para los agricultores y ganaderos de Estados Unidos", dijo.
Cuba importa el 80 por ciento de sus productos agrícolas y es un mercado de $1,7 mil millones de dólares, pero el complejo proceso burocratico es calificado como un obstáculo “autoimpuesto”, por el gobernador de Missouri, Jay Nixon, estado que se beneficiaría de un mayor intercambio comercial.
Kevin Cramer, congresista republicano de Dakota del Norte, dijo que se podría utilizar la relación comercializar para impulsar el cambio democrático en Cuba.
"El comercio es una de las herramientas fundamentales para exportar la democracia", dijo.
El propósito final de la agrupación integrada por unas 30 agremiaciones es ampliar el mercado para las exportaciones del sector agrícola a 11 millones de consumidores cubanos.