El bloguero y periodista cubano del diario digital Catorce y Medio dice que los cubanos viven un luto exagerado que imaginaron por muchos años.
Desde Cuba, Reynaldo Escobar dialogó con la Voz de América y contó detalles que el mundo desconoce del último adiós a Fidel Castro en la isla.
“No tuvimos muchas sorpresas, es más, para muchos fue un funeral muy modesto comparado con el faraónico entierro de Hugo Chávez. Las preguntas de muchos cubanos se quedaron en el aire cuando se anunció la cremación de sus restos porque se imaginaron a Fidel, como a muchos otros, momificado en un mausoleo”, relata Escobar.
“Sus cenizas nunca estuvieron expuestas al pueblo. La gente que hizo largas filas por varias horas y vieron solamente una fotografía, unas flores y unas medallas”, dice Escobar.
El periodista cubano dice que la pequeña urna de cedro que contiene las cenizas del líder de la revolución cubana estuvieron en el Ministerio de Defensa hasta muy avanzada la tarde del lunes, dos días después del fallecimiento de Fidel.
“Cuando Raúl Castro y los altos miembros del gobierno llegaron al lugar para la Guardia de Honor se hizo el traslado de la urna”, afirma Escobar, añadiendo que miles de cubanos ya habían rendido sus respetos sin los restos presentes.
Escobar también menciona la decisión de realizar la caravana que atraviesa gran parte del territorio cubano y menciona que los nombres escogidos son poco correctos.
“'La denominan la Caravana de la Libertad', no sé de qué libertad hablan”, señala el entrevistado.
Escobar también se refirió a las prohibiciones ordenadas durante los nueve días de duelo nacional en Cuba.
“No se puede ver televisión porque es una programación de recuerdos viejos, sus presentadoras no usan maquillaje alguno y todos están vestidos de negro. No se puede escuchar música y se ha prohibido el consumo de bebidas alcohólicas, que en ello lo único bueno es que no tendremos accidentes de tránsito”, remarca Escobar.
Sobre la situación de los disidentes cubanos, el periodista dice que no hubo incidentes y no se reportaron los "habituales sitios que la policía política hace a sus viviendas. El único detenido del que tenemos noticia es el grafitero El Sexto”.
“En La Habana no se ha visto nada de esto, en Camaguey, Sol Bazulto, una periodista de Catorce y Medio recibió la visita de la policía política que le dijo que no podía salir, pero es el único caso que sabemos hasta ahora”, concluye Reynaldo Escobar.