Decenas de cubanos en La Habana esperaban en fila el lunes para solicitar una visa estadounidense en medio de temores de que la normalización de relaciones entre su país y EE.UU. hará más difícil la emigración.
Los cubanos presentaron sus documentos en la Oficina de Intereses de EE.UU. en la Habana que pronto se convertirá en embajada, a medida que EE.UU. y Cuba negocian la primera etapa de su histórica renovación de lazos.
La perspectiva de que una embajada estadounidense en suelo cubano abra sus puertas tras 54 años ha causado alegría y temores entre miles de habitantes de la isla.
Muchos esperan que relaciones más abiertas mejoren la posibilidad de visitar a familiares en Estados Unidos, pero esa esperanza es atenuada por la posibilidad de un cambio en la ley actual que da a los cubanos que alcanzan suelo estadounidense trato preferencial cuando solicitan una visa.
Autoridades de EE.UU. no han informado los planes inmediatos para cambiar las leyes o la política de inmigración.
En una entrevista con National Public Radio, el presidente Obama habló sobre su decisión de normalizar las relaciones con Cuba.
“Las decisiones como la iniciativa diplomática de Cuba son las que quiero asegurar que continúo haciendo, en parte porque francamente es más fácil para un presidente hacerlo al final de su mandato que para un nuevo presidente”, dijo el mandatario.
Además, Obama se refirió a su acción ejecutiva sobre inmigración.
“Si su punto de vista es que los inmigrantes son fundamentalmente malos para el país o que actualmente tenemos la opción de deportar a 11 millones de inmigrantes, sin importar las consecuencias, el costo y lo que somos como estadounidenses, yo rechazo eso”, agregó.
Diplomáticos dicen en privado que Washington espera aumentar el personal en la Habana que actualmente es de unos 50 estadounidenses y 300 cubanos.
