El Club de París anunció este lunes un pacto por el que los acreedores extranjeros de Cuba perdonan a La Habana el pago de $8.500 millones de dólares correspondientes a intereses vencidos.
El ministro galo de Finanzas, Michel Sapin, dijo que el acuerdo "ayuda a resolver definitivamente la cuestión de la deuda de Cuba a medio-largo plazo (...) que no se ha cumplido desde la década de 1980".
Las negociaciones fueron lideradas por Francia, el principal acreedor de Cuba.
Sapid explicó que de los $470 millones en capital e intereses que le adeuda Cuba a Francia, $240 millones serán pagados, mientras el resto será convertido en proyectos de desarrollo para la isla.
La deuda cubana se origina en la situación de impago en la que cayó La Habana en 1986, durante la época de crisis conocida en la isla como el “período especial”, el cual fue provocado por el recorte de ayuda de parte de la antigua ex Unión Soviética que cesó de existir tras la caída del Muro de Berlín.
El perdón de la deuda llega en un momento en que su nuevo benefactor principal, el gobierno socialista de Venezuela, también entra en crisis al haber perdido las elecciones parlamentarias de hace una semana.
La mayoría de los acreedores mostraron flexibilidad dado el interés por hacer negocios en Cuba tras el acercamiento con Estados Unidos.