El gobierno de Raúl Castro expresó desde La Habana su “invariable solidaridad” con el de Nicolás Maduro luego de la captura del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma y repudió la “guerra económica y mediática” contra la Revolución Bolivariana.
En una declaración divulgada por la cancillería cubana, Cuba expresó “su invariable solidaridad y apoyo al pueblo y al Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela […] frente al reciente intento de golpe de Estado, los planes de atentado y las conspiraciones posteriormente denunciadas”.
Cuba también rechazó “enérgicamente” las declaraciones de rechazo de otros países y organismos como la OEA, a los que acusó de alentar y promover la subversión interna y la libre determinación del pueblo venezolano.
Los medios cubanos informaron que el presidente Maduro, visitó la isla el martes pasado, es decir unas 48 horas antes de que ordenara la captura de Ledezma.
Silencio latinoamericano
La reacción cubana contrasta con el silencio oficial generalizado en la región.
Aparte de EE.UU., y los secretarios generales de la OEA y la ONU y de manera más ambigua, Unasur, el resto de gobiernos poco han dicho sobre la captura del alcalde.
El viernes, Maduro llamó a los gobiernos “hermanos” de América Latina a ser solidarios con su país.
"Hago un llamado a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), hago un llamado a los patriotas de América Latina: alerta, alerta en defensa de la paz de Venezuela", dijo Maduro durante un acto gubernamental en Caracas.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, por ejemplo, declinó hacer comentarios sobre “asuntos internos” de Venezuela, aunque más tarde en un breve comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores brasileño, el gobierno reiteró “su compromiso de contribuir, siempre que sea solicitado, a la reanudación del diálogo político y constructivo en Venezuela”.
Venezuela, a través del ALBA y Petro Caribe proporciona ayuda financiera y en petróleo a muchos de los países latinoamericanos y caribeños. Cuba recibe unos 100.000 barriles diarios de petróleo venezolano desde el año 2000.
La secretaria de Estado adjunta para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, llamó a la región a mantenerse vigilante de la situación en Venezuela.
"La región también debe trabajar para asegurar que el gob. de #Venezuela cumpla su compromiso común con la democracia" , apuntó Jacobson.
Sin mencionar el caso de Ledezma, el secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, anunció una próxima visita a Caracas, sin fecha, de los cancilleres de Brasil, Colombia y Ecuador, así como una futura reunión extraordinaria de cancilleres de la Unión para analizar el tema.