Con numerosas interrupciones y acalorados ataques, los aspirantes republicanos a la presidencia de Estados Unidos, Marco Rubio y Ted Cruz, arremetieron contra el empresario Donald Trump.
Durante un debate celebrado en Houston, Texas, Rubio acusó a Trump de haber pagado multas por contratar a mano de obra "ilegal", utilizando un término repudiado por grupos proinmigración para referirse a migrantes sin permiso de residencia.
Trump, un multimillonario empresario conocido por su estilo informal para debatir, se defendió de inmediato interrumpiendo al senador por Florida.
"Soy el único en este escenario que ha contratado personas," dijo Trump. Rubio no abandonó su argumento y siguió insistiendo.
Por su parte, el senador por Texas Ted Cruz reforzó las acusaciones de su rival para la nominación republicana.
"Un tribunal federal declaró que Trump era culpable de contratar gente ilegalmente y tuvo que pagar una multa de un millón de dólares" dijo Cruz.
Esta fue la primera vez en casi una decena de debates en que ambos senadores, hijos de inmigrantes cubanos, aprovecharon todas sus oportunidades para arremeter contra el magnate inmobiliario, que lidera la contienda por la nominación presidencial republicana.
El debate televisado por primera vez a una audiencia hispanohablante por Telemundo en alianza con CNN, llega a escasos días de las primarias del Súper Martes, el 1 de marzo, fecha clave en la que votarán 11 estados.
Rubio aseguró que si es elegido una de sus primeras acciones será rescindir la orden ejecutiva del presidente Barack Obama, conocida como DACA, que da protección temporal contra la deportación a los jóvenes que llegaron ilegalmente al país cuando eran menores de edad.
Trump encabeza la contienda republicana y su éxito dependerá del número de delegados que logre en las próximas primarias.
Hasta ahora Trump tiene 82 delegados, Cruz 16, Rubio 6, mientras que John Kasich y Ben Carson cierran la lista con cuatro respectivamente.