Estados Unidos no tiene planes de evacuar su embajada en Bagdad y se están enviando fuerzas adicionales después de manifestaciones violentas fuera del complejo por manifestantes y combatientes de la milicia enfurecidos por los ataques aéreos estadounidenses, dijeron el martes funcionarios estadounidenses.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, culpó a Irán por "orquestar" el ataque contra la embajada de Estados Unidos en Bagdad y dijo que responsabilizaría a Teherán.
"El personal de los Estados Unidos está seguro y no ha habido violación. No hay planes de evacuar la Embajada de Bagdad", dijo un portavoz del Departamento de Estado.
El portavoz agregó que el embajador de EE. UU. En Irak, Matt Tueller, había estado en un viaje personal previamente programado y regresaba a la embajada.
Un grupo de seguidores de la milicia chií en Irak echaron abajo el martes una puerta de entrada de la embajada de Estados Unidos en Bagdad y entraron por la fuerza.
“Irán mató a un contratista estadounidense e hirió a muchos”, dijo Trump a través de su cuenta de Twitter.
En ese sentido, remarcó que el ejecutivo de Estados Unidos respondió “fuertemente” y que “siempre” lo hará.
“Ahora Irán está orquestando un ataque contra la embajada de Estados Unidos en Irak. Serán completamente responsables. Además, esperamos que Irak use sus fuerzas para proteger la embajada”, subrayó Trump.
Mientras tanto, el secretario de Estado Mike Pompeo le advirtió a Irak que Estados Unidos 'defenderá a su gente' tras el ataque contra su embajada, según AFP.
"Respondimos defensivamente al ataque proxy iraní que mató a un ciudadano estadounidense e hirió a soldados estadounidenses e iraquíes. Ahora, los grupos respaldados por Irán amenazan nuestra embajada en Bagdad" indicó Pompeo en un tuit.
"Hablé con el primer ministro Mahdi y el presidente Salih para reiterar su obligación de proteger a nuestro personal y propiedad de EE. UU." dijo Pompeo en otro tuit.
Medios como Reuters y AP dijeron que las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a la multitud de manifestantes que se encontraban al otro lado del muro que separa el complejo, denominado “Zona Verde”, y que está fortificada.
Un reportero de AP en la zona vio llamas saliendo en el interior del recinto diplomático y al menos tres soldados estadounidenses en el tejado de la embajada.
La agencia Reuters también reporta que varias granadas fueron lanzadas por guardias de seguridad desde el interior de la Embajada de Estados Unidos a los protestantes que estaban afuera.
No estuvo claro de inmediato qué causo el fuego en la zona de recepción, ubicada cerca del estacionamiento del complejo. A través de un altavoz, un hombre pidió a los manifestantes que no entrasen el reciento diciendo: “El mensaje ha sido entregado”.
No era claro si el personal de la embajada seguía dentro del edificio principal.
Medios emplazados en el lugar informaron que la puerta que cedió era una entrada lateral, empleada por los autos que acceden al complejo. Cientos de manifestantes habían avanzado alrededor de cinco metros (16 pies) por un pasillo que lleva al edificio principal, pero seguían a unos 200 metros de él.
Cientos de personas se habían congregado frente a las oficinas consulares del gobierno de Estados Unidos tras los letales ataques aéreos de Washington en el que murieron 25 combatientes.
La agencia AP dijo que más temprano el martes, y al grito de “¡Abajo Estados Unidos!”, una multitud intentó entrar a los terrenos de la sede diplomática, arrojando botellas de agua y destrozando cámaras de seguridad en el exterior.
Reacción del gobierno de Irak
El primer ministro iraquí, Adel Abdul Mahdi, había condenado el lunes los ataques aéreos estadounidenses contra bases de las milicias iraquíes respaldadas por Irán, una medida que podría arrastrar aún más a Irak al conflicto entre Washington y Teherán.
Pero el martes, tras el asalto a la embajada estadounidense, Mahdi advirtió sobre las agresiones a embajadas y sedes diplomáticas extranjeras en el país, pidiendo a los manifestantes que se encuentran fuera de la sede que abandonen el lugar.
Mahdi, quien es primer ministro interino, dijo en un comunicado que cualquier agresión contra las embajadas extranjeras sería detenida por las fuerzas de seguridad y castigada severamente por ley.