El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que el huracán Dorian es errático, poderoso y de movimiento lento.
Trump recibió una actualización del estado del huracán, mientras hablaba con periodistas en la Oficina Oval de la Casa Blanca, en Washington.
"Tuvimos muchísima suerte en Florida, primero pensábamos que iba a golpear directamente y que habría afectado mucho otros estados. Este era el mapa original. Y va golpear no solamente Florida, sino también Georgia. Se iba a adentrar en el Golfo, lo que se proyectó originalmente. Tomó un giro a la derecha y, quizás tengamos suerte", dijo Trump.
Señaló que estaría atento de la situación en Carolina del Sur y Carolina del Norte y anunció la ayuda de la guardia costera a Estados Unidos.
"Una gran parte de las Bahamas ha sido golpeada y estamos ofreciendo ayuda humanitaria que nos ha solicitado el gobierno de Bahamas; tenemos varios helicópteros. estamos enviado a varias personas que necesitan una mano", añadió.
El secretario de seguridad Nacional, Kevin McAleenan, quien se reunió con Trump, dijo que Estados Unidos está preocupado por el impacto del huracán en las Carolinas y en Charleston, Carolina del Sur.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) informó el miércoles al medio día que Dorian "se mueve paralelo a la costa noreste de Florida, trayendo fuertes lluvias y rachas de viento a la costa sureste de Estados Unidos".
El miércoles, el fenómeno mantenía su intensidad como huracán Categoría 2, con vientos sostenidos de 105 mph.
Según el NHC, ciudades costeras estaban experimentando "vientos destructivos, intensas lluvias, inundaciones e intenso oleaje".
El centro había informado más temprano que el vórtice del devastador huracán Dorian pasaba en la madrugada del miércoles al este de Cabo Cañaveral, Florida.
El letal meteoro estaba a 144 kilómetros al este-noreste de Cabo Cañaveral. Los vientos máximos sostenidos de la tormenta alcanzaron 175 km/h y se desplaza con dirección nor-noroeste a 11 km/h.
El NHC, con sede en Miami, prevé que Dorian efectúe un giro hacia el norte el miércoles en la noche, y otro hacia el norte-noreste el jueves por la mañana.
Lo peor del huracán Dorian, ahora categoría 2, abandonó las Bahamas el martes dejando al menos siete muertos, mientras comenzaba a moverse más rápido a su llegada a las costas estadounidenses.
"Podemos esperar que se registren más muertes. Esto es solo información preliminar", dijo el martes el primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis.
"Marsh Harbour ha sufrido, estimaría, más del 60 por ciento de daño a sus viviendas", afirmó Minnis, refiriéndose al puerto en Gran Ábaco.
Funcionarios de rescate reportaron escenas de devastación absoluta en partes de las Bahamas y se apresuran a hacer frente a una inminente crisis humanitaria. Se desconoce el alcance total de la devastación.
Fuertes vientos e inundaciones destruyeron o causaron daños severos en miles de casas, inutilizaron hospitales y atraparon a personas en sus áticos.
"Es una devastación total. Quedó destruida. Apocalíptico. Parece como si una bomba hubiera explotado", dijo Lia Head-Rigby, quien ayuda a manejar una organización local de asistencia y que realizó un recorrido aéreo por las Islas Ábaco, una de las zonas más afectadas. "No se puede reconstruir lo que estaba ahí; hay que empezar de nuevo".
El ojo del huracán se moverá peligrosamente cerca de la costa este de Florida y Georgia hasta la noche del miércoles. Después se espera que pase cerca o por encima de la costa de Carolina del Sur y Carolina del norte entre el jueves y el viernes por la mañana.
