El número de solicitudes del subsidio por desempleo cayó la semana pasada a su nivel más bajo desde el inicio de la pandemia, señal de que el mercado laboral y la economía estadounidense en general se recuperan rápidamente de la recesión provocada por el coronavirus.
El Departamento de Trabajo informó el jueves que las solicitudes cayeron en 51.000, quedando en 364.000. Los pedidos de prestaciones por desempleo han caído de manera más o menos constante desde el comienzo del año. La campaña de vacunación ha reducido rápidamente los nuevos casos de COVID-19, lo que da a los consumidores la confianza para comprar, viajar, comer en restaurantes y asistir a eventos públicos a medida que se recupera la economía.
La caída de las solicitudes la semana pasada fue mayor que lo previsto por los economistas. En 10 de las últimas 12 semanas, este indicador ha bajado.
“A medida que se normaliza la vida y el sector de servicios sigue cobrando impulso, prevemos que las solicitudes por desempleo continuarán en una tendencia descendente”, dijo Joshua Shapiro, economista en jefe de la consultora Maria Fiorini Ramirez.
El gasto contenido ha generado una gran demanda de mano de obra, sobre todo en restaurantes y negocios vinculados con el turismo. Muchos empleadores tienen problemas para llenar los puestos, y la oferta ha alcanzado un nivel récord. Pero muchos economistas prevén que la contratación alcanzará a la demanda en los próximos meses, sobre todo a medida que caducan los programas de ayuda federal y más gente busca empleo.