El excandidato presidencial opositor de Ecuador Guillermo Lasso presentó el lunes una apelación ante la justicia electoral en la que reclamó el recuento total de los votos, pero su requerimiento fue denegado.
Lasso pidió que se realice de forma inmediata "la apertura de la totalidad de las urnas a fin de efectuar un nuevo escrutinio manual, voto a voto, correspondientes a la segunda vuelta electoral celebrada el 2 de abril".
A su vez exigió que se revoquen los resultados y que se declare la nulidad del escrutinio que dio como ganador al oficialista Lenín Moreno.
El Tribunal Contencioso Electoral, el máximo organismo para dirimir diferencias en el plano electoral, respondió por la noche que "inadmitió" los pedidos formulados.
Argumentó que al pedir la nulidad de escrutinios y la apelación de resultados numéricos en un solo trámite "resulta improcedente e ilegal" porque tienen motivaciones y trámites diferentes.
Lasso de inmediato comentó que ese Tribunal "ha cerrado la puerta a la democracia... poniendo pretextos procesales para negar la más elemental justicia" y aseveró que "no dejaremos solos a los ciudadanos en las calles".
Tanto el partido de Lasso, CREO, como el de Moreno, Alianza País, presentaron recursos por separado en los que denunciaron irregularidades numéricas en las actas electorales, inconsistencias en esos documentos y atribución de los sufragios al otro postulante.
La mayoría de las actas fueron impugnadas por el opositor. Moreno había ganado por unos 235.000 votos de diferencia.
Tras una impugnación presentada la semana pasada por Lasso, el Consejo Electoral admitió el recuento de 3.865 actas, equivalentes de 1,27 millones de votos que serán contados manualmente el martes.
Lasso sostenía que las actas con presuntas irregularidades eran una evidencia que ameritaba la apertura de todas las urnas y no sólo del 10% que se va a reabrir.
La confusión comenzó luego de que encuestas de boca de urna dieran ganador a Lasso, resultado que se invirtió horas después de iniciado el escrutinio.
Tras ello, miles de ciudadanos se lanzaron a las calles en protestas pacíficas para reclamar lo que consideran un fraude electoral para favorecer a Moreno.
Si no progresan los recursos de CREO, el postulante oficialista asumirá el poder el 24 de mayo en reemplazo de Rafael Correa.