El coronel Morris Davis, ex fiscal jefe de las comisiones militares de Guantánamo entre 2005 y 2007, dijo en el Congreso de Estados Unidos que es necesario que la administración de Barack Obama designe a un funcionario que lidere el cierre de la prisión.
“Si cualquier otro país estuviera tratando a sus presos como nosotros tratamos a los de Guantánamo lo criticaríamos con dureza y con razón”, exclamó el coronel Davis en el Capitolio.
Agregó que "más de 160 hombres que nunca han sido acusados de ningún delito, y mucho menos condenados por un crimen de guerra, permanecen en Guantánamo sin un final a la vista”.
El coronel Morris Davis inició una campaña para clausurar el penal en la base naval militar de EE.UU. en la isla de Cuba, y hasta la fecha tiene 190 mil firmas recolectadas.
Actualmente, 100 detenidos adelantan una huelga de hambre a la que desde hace tres meses se han ido sumando presos. En total, en la prisión, hay 166 detenidos.
La mayoría de los custodios están dedicados a alimentar por la fuerza a los hombres que presentan estados críticos por falta de alimentación.
“Durante 25 años serví en la Fuerza Aérea de EE UU y fui el fiscal jefe de los juicios antiterroristas de Guantánamo durante más de dos años. Ahora necesito tu ayuda. Yo acusé a Salim Hamdan, chofer de Osama Bin Laden; al australiano David Hicks; y al adolescente canadiense Omar Khadr. Los tres fueron declarados culpables y luego fueron liberados de Guantánamo”, dijo Davis en el pleno de la sesión del Congreso.
El coronel que encabeza la campaña instó al secretario de Defensa, Chuck Hagel, para que acuda a “su autoridad para que se efectúen las transferencias de presos de Guantánamo ya aprobadas”.
El congresista demócrata por Virginia, Jim Moran, organizador de la audiencia, dijo que Guantánamo “se ha convertido en una crisis humanitaria que necesita ser abordada ya”.
El presidente Obama se comprometió durante su primer mandato a cerrar el penal, pero concluyó su período sin cumplir la promesa. Ahora, se ha lanzado de nuevo con la iniciativa y espera que el Congreso lo respalde.
“Si cualquier otro país estuviera tratando a sus presos como nosotros tratamos a los de Guantánamo lo criticaríamos con dureza y con razón”, exclamó el coronel Davis en el Capitolio.
Agregó que "más de 160 hombres que nunca han sido acusados de ningún delito, y mucho menos condenados por un crimen de guerra, permanecen en Guantánamo sin un final a la vista”.
El coronel Morris Davis inició una campaña para clausurar el penal en la base naval militar de EE.UU. en la isla de Cuba, y hasta la fecha tiene 190 mil firmas recolectadas.
Actualmente, 100 detenidos adelantan una huelga de hambre a la que desde hace tres meses se han ido sumando presos. En total, en la prisión, hay 166 detenidos.
La mayoría de los custodios están dedicados a alimentar por la fuerza a los hombres que presentan estados críticos por falta de alimentación.
“Durante 25 años serví en la Fuerza Aérea de EE UU y fui el fiscal jefe de los juicios antiterroristas de Guantánamo durante más de dos años. Ahora necesito tu ayuda. Yo acusé a Salim Hamdan, chofer de Osama Bin Laden; al australiano David Hicks; y al adolescente canadiense Omar Khadr. Los tres fueron declarados culpables y luego fueron liberados de Guantánamo”, dijo Davis en el pleno de la sesión del Congreso.
El coronel que encabeza la campaña instó al secretario de Defensa, Chuck Hagel, para que acuda a “su autoridad para que se efectúen las transferencias de presos de Guantánamo ya aprobadas”.
El congresista demócrata por Virginia, Jim Moran, organizador de la audiencia, dijo que Guantánamo “se ha convertido en una crisis humanitaria que necesita ser abordada ya”.
El presidente Obama se comprometió durante su primer mandato a cerrar el penal, pero concluyó su período sin cumplir la promesa. Ahora, se ha lanzado de nuevo con la iniciativa y espera que el Congreso lo respalde.