Un proyecto de presupuesto de 1,2 billones de dólares presentado ante el legislativo el jueves prepara la escena para evitar un cierre parcial de varios organismos federales cruciales y permite al Congreso, casi en el sexto mes del año fiscal, financiar al gobierno hasta setiembre.
Los demócratas pudieron en gran medida rechazar cientos de mandatos y algunos recortes presupuestarios grandes que los republicanos intentaban aplicar a programas no relacionados con la defensa, aunque el presidente de la cámara baja, Mike Johnson, destacó algunos logros como el aumento de 24 % en camas de sitios de detención de migrantes que aguardan sus procesos inmigratorios o la expulsión del país.
Los proyectos de gastos se dividieron en dos paquetes. El primero fue aprobado por el Congreso hace dos semanas, horas antes de un plazo que hubiera cerrado varias entidades federales.
Ahora el Congreso se aboca al segundo paquete, el más grande, que incluye 886.000 millones de dólares para el Departamento de Defensa, un 3 % más que el año pasado. El proyecto de ley de 1.012 páginas financia los departamentos de Seguridad Nacional, Salud y Trabajo, entre otros.
El gasto no relacionado con la defensa muestra relativamente pocos cambios comparado con el año anterior. Algunos, como la Agencia de Protección Ambiental, sufrirán rebajas, y el presupuesto de muchas entidades no compensará la inflación.
Combinando los dos paquetes, el gasto discrecional para el año fiscal será de 1,66 billones de dólares. Esto no incluye programas como el Seguro Social y el Medicare, el seguro médico para pensionados y discapacitados. Tampoco incluye la financiación de la deuda pública.
La Cámara de Representantes abordará la medida el viernes. Luego pasará a la cámara alta, donde los senadores deberán acordar su tratamiento expeditivo para evitar un cierre parcial. Generalmente, esos acuerdos incluyen votaciones sobre enmiendas propuestas al proyecto.
Johnson promovió el proyecto como un compromiso serio con el reforzamiento de la defensa al obligar al Pentágono a enfocarse en su misión central y ampliar el apoyo a quienes revistan en las fuerzas armadas. El proyecto incluye un aumento del 5,2 % para los militares.
Uno de los cambios mencionados por Johnson fue prohibir los fondos hasta marzo de 2025 para la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA por sus siglas en inglés), que es la principal proveedora de alimentos, agua y refugios para los civiles en Gaza.
Los republicanos insisten en dejar de financiar esa agencia desde que Israel denunció que una decena de sus empleados participaron en la incursión de Hamás del 7 de octubre.
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