Un día después que se revelara un memorándum oficial en el que se aprueban los ataques con drones dirigidos a estadounidenses en el extranjero, vinculados con el terrorismo y grupos radicales, sale a la luz la existencia de una base secreta que la CIA ha mantenido por los últimos dos años en Arabia Saudita.
Así lo dieron a conocer los medios estadounidenses, que citaron a fuentes que afirman que desde esa base se lanzaron aviones no tripulados, conocidos como drones, dirigidos por control remoto contra sus objetivos, terroristas vinculados a la organización terrorista Al Qaeda ubicados en Yemen.
Incluso se menciona que desde allí se lanzó el drone para matar al clérigo radical islamista de origen estadounidense, Ankar al Awlaki en septiembre de 2011.
Al Awlaki era un líder de Al Qaeda en la península arábiga.
Según cita The Washington Post, John Brennan, designado por el gobierno de Barack Obama para dirigir la CIA y asesor de la Casa Blanca en política antiterrorista, desempeñó un papel clave en las negociaciones con Arabia Saudita para el establecimiento de la base hace dos años con el propósito de intensificar la guerra contra Al Qaeda.
El Post no reveló la ubicación de la base por ser considerado un asunto de seguridad nacional, pero The New York Times sí lo menciona en su versión en línea.
Por su parte la Casa Blanca justificó los ataques con drones contra ciudadanos estadounidenses y dijo que eran “legales, éticos y sensatos”.
Además señaló que eran necesarios para mitigar las amenazas reales y evitar atentados a futuro que pongan en riesgo la vida de los estadounidenses.
Un grupo de senadores ha pedido que se clarifique bajo qué circunstancias se ordena un ataque con drones contra ciudadanos estadounidenses, pero no han tenido respuesta de la Casa Blanca.
Así lo dieron a conocer los medios estadounidenses, que citaron a fuentes que afirman que desde esa base se lanzaron aviones no tripulados, conocidos como drones, dirigidos por control remoto contra sus objetivos, terroristas vinculados a la organización terrorista Al Qaeda ubicados en Yemen.
Incluso se menciona que desde allí se lanzó el drone para matar al clérigo radical islamista de origen estadounidense, Ankar al Awlaki en septiembre de 2011.
Al Awlaki era un líder de Al Qaeda en la península arábiga.
Según cita The Washington Post, John Brennan, designado por el gobierno de Barack Obama para dirigir la CIA y asesor de la Casa Blanca en política antiterrorista, desempeñó un papel clave en las negociaciones con Arabia Saudita para el establecimiento de la base hace dos años con el propósito de intensificar la guerra contra Al Qaeda.
El Post no reveló la ubicación de la base por ser considerado un asunto de seguridad nacional, pero The New York Times sí lo menciona en su versión en línea.
Por su parte la Casa Blanca justificó los ataques con drones contra ciudadanos estadounidenses y dijo que eran “legales, éticos y sensatos”.
Además señaló que eran necesarios para mitigar las amenazas reales y evitar atentados a futuro que pongan en riesgo la vida de los estadounidenses.
Un grupo de senadores ha pedido que se clarifique bajo qué circunstancias se ordena un ataque con drones contra ciudadanos estadounidenses, pero no han tenido respuesta de la Casa Blanca.
