Las fuerzas afganas "podrán para 2020 tener lo que necesitan para luchar mayormente solas" contra el Talibán, aseguró el embajador afgano en Estados Unidos, Hamdullah Mohib, a la junta editorial del diario USA Today.
Actualmente el ejército de Afganistán lucha contra los insurgentes talibanes con ayuda de las fuerzas estadounidenses y de otros países bajo un acuerdo que dura hasta 2020.
El embajador Mohib explicó a los editores del USA Today que su país no planea "crear un nuevo ejército, sino ajustarse a las fuerzas que tiene".
El diplomático indicó que su pronóstico asume que no habrá cambios importantes en la amenaza de seguridad en Afganistán, pese a que el Estado Islámico ha penetrado en el país, pero no es considerado una amenaza mayor.
Mohib también aseguró que la nueva fuerza aérea afgana está haciéndose más autosuficiente.
Sin embargo, el diario apunta que incluso si las fuerzas afganas son mayormente autosuficientes para el 2020, la nación requerirá ayuda internacional financiera por muchos años.
Estados Unidos provee la mayor parte de esa asistencia, incluidos $67.000 millones desde 2005, solo para el fortalecimiento de la fuerza de seguridad afgana, que en la actualidad tiene 350.000 efectivos, incluidas las fuerzas de policía y del ejército.
Las tropas estadounidenses están en Afganistán desde 2001, cuando derrocaron al régimen talibán por brindar refugio al grupo terrorista al-Qaeda luego de los ataques del 11 de septiembre.
El embajador de Afganistán dijo al USA Today que las fuerzas de su país sufren el mayor número de bajas en la guerra contra el Talibán. Solo el año pasado, 29.000 soldados afganos murieron en la lucha, y muchos quedaron heridos.
A principios de este año, el general estadounidense John Nicholson, principal comandante de su país en Afganistán, pidió al Congreso "unos cuantos miles" de tropas adicionales para ayudar al ejército afgano a ganar el conflicto contra el Talibán. Los legisladores no han tomado una decisión.
Estados Unidos tiene actualmente 8.400 soldados en Afganistán, una cifra reducida de los casi 100.000 que tuvo en 2011. Los militares estadounidenses no participan en combates directos, sino como asistentes y asesores del ejército afgano y proveyendo apoyo aéreo a las fuerzas afganas.
Más de 2.200 efectivos de Estados Unidos han muerto en Afganistán desde la invasión. La lucha contra el Talibán se ha estancado dijo el general Nicholson en el Congreso, y los insurgentes no han logrado tomar control de ninguna ciudad importante, pero han hecho progreso en zonas remotas del país.
El embajador Mohib dijo al USA Today que al gobierno de Afganistán le gustaría duplicar el número de sus comandos de operaciones especiales, una fuerza de élite entrenada en Estados Unidos que ha logrado progreso significativo en la lucha contra el Talibán.
Según datos del Pentágono, el comando de operaciones especiales afgano tiene actualmente 11.700 soldados.
