El altamente anticipado encuentro entre el presidente Donald Trump y el vice fiscal general, Rod Rosenstein, podría ser retrasado de nuevo.
La reunión que estaba programada para la semana pasada fue movida para esta semana porque la fecha escogida coincidió con la audiencia del senado sobre la nominación a la Corte Suprema de Brett Kavanaug.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, dijo el domingo que Trump y Rosenstein podrían reunirse esta semana -en una fecha que aún está por decidir- pero agregó que el encuentro podría retrasarse de nuevo dado que continúa el interés en la nominación de Kavanaugh.
En la audiencia del jueves, Christine Blasey Ford, una profesora de psicología que acusa a Kavanaugh de haberla asaltado sexualmente durante el bachillerato, dio su testimonio ante el Comité Juidicial del Senado. Kavanaugh, quien niega las acusaciones, también intervino en la audiencia.
El FBI revisará de nuevo el historial de Kavanaugh en luz de las acusaciones de Ford y de otras dos mujeres.
Respondiendo a una pregunta sobre los temas que Trump quiere discutir con Rosenstein, Sanders dijo que ella no quería “adelantarse” a la conversación.
“Todavía no se ha definido una fecha para ello. Podría ser esta semana. También podría postergarla a la próxima semana, teniendo en cuenta todas las otras cosas que están sucediendo en la Corte Suprema, pero ya veremos”, dijo la portavoz en el programa de televisión ‘Fox News Sunday.
El cargo de Rosenstein como el número dos dentro del Departamento de Justicia podría estar tambaleando después de que varios medios informara que discutió sobre posiblemente grabar en secreto a Trump y sobre invocar la enmienda 25 de la Constitución para sacarlo de la Casa Blanca.
El Departamento de Justicia emitió comunicados de Rosenstein con el objetivo de negar las informaciones. El departamento mandó un comunicado de un individuo que recordaba el comentario sobre grabar al presidente pero que Rosenstein lo decía sarcásticamente.
Rosenstein llegó a la Casa Blanca el último lunes con la expectativa de que sería despedido. En cambio, la Casa Blanca dijo que el y Trump se encontrarían el último jueves, después de que el presidente volviera de Nueva York.
Sin embargo, el encuentro se pospuso hasta esta semana después de que Sanders dijo que Trump quería concentrarse en la audiencia del senado con Kavanaugh y Ford.
Trump y Rosenstein hablaron la semana pasada cuando Trump estaba en Nueva York. Trump dijo después que Rosenstein había negado los informes durante su conversación y que “ciertamente no preferiría” despedir a Rosenstein.
Como el segundo al mando en el Departamento de Justicia, Rosenstein supervisa la investigación del consejero especial sobre la interferencia rusa en las elecciones. Trump insiste que “no hubo colusión” entre su campaña presidencial y Rusia. El presidente incluso ha llamado a la investigación una “casa de brujas”.