Jeffrey Lacker, el presidente de la Reserva Federal de Richmond, renunció tras reconocer que reveló información confidencial a un analista financiero hace varios años.
Según informa el Washington Post, Lacker, dijo que en 2012 habló con un analista del grupo Medley Global Advisers, una firma de investigación macroeconómica propiedad del Financial Times Limited. El analista le preguntó sobre detalles que no habían sido publicados relacionados con opciones de política.
"Debido a la altamente confidencial y delicada naturaleza de esta información, debí haber declinado comentar y quizás terminar la llamada telefónica. Pero en lugar de eso, no me negué ni expresé que no podía comentar y la entrevista continuó", dice Lacker en el comunicado donde anuncia y explica su renuncia.
Cuando Medley publicó un informe del analista al día siguiente con los detalles sobre una de las opciones de política, Lacker comprendió que al no haberse negado a comentar la información,"pudo haber sido tomado por el analista, en el contexto de la conversación, como una aceptación o confirmación", dice el exfuncionario de la FED en el comunicado.
Lacker, quien trabajó durante 28 años en la Reserva Federal de Richmond, había anunciado que pensaba retirarse el 1 de octubre de 2017.
En su documento de renuncia, Lacker dice que no reveló en investigaciones subsecuentes los detalles de su conversación.Legisladores en el Congreso estadounidense han criticado fuertemente a la FED por no proporcionar información sobre su investigación en el asunto.
Los anuncios de la Reserva Federal sobre los cambios a la política monetaria, que influyen en las tasas de préstamos, tienen enorme impacto en la economía. Como resultado, incluso los más pequeños rumores pueden potencialmente estremecer los mercados financieros.
La FED, el Departamento de Justicia y la Commodity Futures Trading Comission (Comisión de Comercio en Futuros sobre Materias Primas) han estado investigado la filtración relacionada con un plan que la FED discutió en una reunión del 12 y 13 de septiembre para comenzar a comprar miles de millones en bonos del tesoro mensualmente con el fin de estimular la economía.
La información debía ser anunciada al público el 4 de octubre, pero el Wall Street Journal publicó un artículo el 28 de septiembre, donde incluía información confidencial discutida por la FED en la reunión de septiembre. Medley envió una nota de la investigación a sus clientes el 3 de octubre, con más detalles.
El entonces presidente de la FED, Ben Bernanke, ordenó investigar la filtración, pero no se logró descubrir quién la reveló a Medley. La actual presidenta de la FED, y en ese tiempo segunda de Bernanke, Janet Yellen, fue brevemente considerada sospechosa porque se había reunido con la analista de Medley que escribió el informe, Regina Schleiger, antes de que ocurriera la filtración.
En su declaración de renuncia, Lacker explica que no reveló a los abogados de la FED durante una investigación interna en 2012, que pudo haber filtrado informado confidencial, pero dice que en una entrevista en 2015 con agentes policiales sí reportó el incidente.
Lacker dice que lamenta profundamente el error y que nunca fue su intención revelar información confidencial. No está claro aún si enfrentará cargos penales por la filtración.
Observadores de la FED habían especulado que la administración Trump podía estar considerando a Lacker para el cargo de vice-director de supervisión, que quedará vacante cuando renuncie a principios de abril el actual gobernador de la FED, Daniel Tarullo.