El gobierno iraní rechazó las acusaciones que le hizo Estados Unidos de estar dándoles armas a los insurgentes que atacan a los soldados estadounidenses en Irak.
La prensa estatal iraní citó este miércoles al ministro de Inteligencia, Heidar Moslehi, diciendo que las acusaciones contra el régimen de Teherán son infundadas.
La información también precisó que el portavoz de la cancillería iraní, Ramón Mehmanparast, calificó de “gran mentira” la declaración hecha por Washington.
El secretario de Defensa de EE.UU., Leon Panetta, dijo el lunes que las fuerzas estadounidenses actuarían contra el suministro de armas por Irán a los militantes chiitas que llevan a cabo una ola de ataques en Irak.
En junio pasado, presuntos insurgentes chiitas dieron muerte a 14 soldados estadounidenses en ese país, y al menos otros dos militares corrieron igual suerte en ataques este mes.
Hablándoles a soldados estadounidenses en Bagdad, Panetta dijo que EE.UU. no sólo no retrocedería ante los ataques sino que, además, les daría respuesta unilateralmente.
Aunque en el pasado los dos países fueron adversarios, en los últimos meses las relaciones diplomáticas y comerciales entre Irak e Irán se han incrementado.
