En medio de lemas antiracistas, familiares y amigos despidieron a Heather Heyer, la mujer que fue atropellada el sábado por un auto conducido por un individuo con ideas neo-nazis mientras se encontraba protestando contra manifestaciones de nacionalistas blancos en Charlottesville, Virginia.
"Ellos trataron de matar a mi hija para callarla, pero adivinen qué, solo la magnificaron", dijo Susan Bro en el funeral de su hija.
"Si no estás indignado, no estás prestando atención" afirmó Bro citando las palabras favoritas de su hija en redes sociales. "Ella prestó atención e hizo que muchos de nosotros prestáramos atención (...) Quiero que esto se extienda, no quiero que esto muera, esto es solo el comienzo del legado de Heather", precisó.
El padre de Heather, Mark Heyer, exhortó al mundo a detener el odio y “perdonarnos unos a otros (...) Me incluyo en perdonar al chico que hizo esto. Él no sabe nada mejor. Solo pienso en lo que el Señor dijo en la cruz. Señor, perdónalos. Ellos no saben lo que hacen”, argumentó Mark Heyer al explicar que su hija lo que quería, era "bajar el odio".
Para el abuelo de Heyer, Elwood Shrader, Heather siempre quiso ser justa, “incluso desde temprana edad”.
"Era muy compasiva, muy precisa, y tenía un gran corazón", dijo en el furenal de Heyer Larry Miller, jefe del bufete de abogados donde trabajaba la mujer. "Heyer quería asegurarse de que las cosas estuvieran bien. Se preocupaba por las personas".
El gobernador de Virginia, Terry McAuliffe dijo: "esta es una semana muy dura para la Mancomunidad de Virginia. Pero el mensaje que escuchamos hoy de todos los que hablaron es que ahora es un tiempo para la curación, es hora de la reconciliación. Tenemos que seguir adelante, tenemos que dejar el odio detrás. Para hacer que la vida de Heyer tenga impacto, tenemos que seguir adelante ".
Por su parte el Senador, Tim Kaine del Estado de Virginia precisó: "Hemos recorrido un largo camino bajo el liderazgo ilustrado, hemos recorrido un largo camino luchando contra la división y los sectarismos de épocas pasadas. Y hay gente que quiere traernos de vuelta a ella, muchos de ellos que no son ni siquiera de la Mancomunidad, sino que quieren arrastrarnos hacia atrás".
"Pero lo que muestra la vida de Heather, lo que esta comunidad muestra, lo que Virginia muestra es que no vamos a volver. No volveremos a días de odio, de intolerancia y división, no vamos a volver. Y no importa quién trate de llevarnos de vuelta o no importa quién enaltece a aquellos que intentarían llevarnos de vuelta, no vamos hacia atrás ".precisó el senador Kaine.
El presidente Donald Trump tuiteó este miércoles por primera vez sobre Heyer, llamándola "hermosa e increíble" y una "joven verdaderamente especial".
Sin embargo, la Casa Blanca no respondió a preguntas sobre si el presidente había contactado a la familia de Heyer.
El estado de Virginia, realizó un sentido homenaje a Heyer. Mujeres se sentaron frente a un improvisado memorial en recuerdo de las víctimas del ataque con automóvil del pasado 12 de agosto de 2017.
Cientos de nacionalistas blancos -incluyendo neonazis, skinheads (cabezas rapadas) y miembros de Ku Klux Klan acudieron a protestar en Charlottesville después de que la ciudad, sede de la Universidad de Virginia, decidió trasladar a otro sitio un monumento al general confederado Robert E. Lee que está en el centro de la urbe.
El conductor del coche, James Alex Fields Jr., un hombre de 20 años de Ohio, descrito como un admirador de Adolf Hitler y la Alemania nazi, fue arrestado y acusado de asesinato y otros delitos.
Mientras tanto, la ciudad de Baltimore, en Maryland, desmanteló cuatro monumentos relacionados con la Confederación después de la medianoche del martes, que incluían estatuas de Lee y el general Thomas "Stonewall" Jackson, otro jefe militar confederado.
En Boston, un estudiante de 18 años que asistió al mitin blanco nacionalista en Virginia el fin de semana pasado, informó a medios locales que se retiró de la Universidad en Boston por amenazas de muerte.
La universidad confirmó que el joven ya no está inscrito.
Nicholas Fuentes dijo al Boston Globe que ha recibido 15 amenazas a través de correo electrónico y redes sociales.
Dos agentes de policía también murieron el sábado cuando el helicóptero en que volaban -desde el cual habían grabado los disturbios- se separó para apoyar la caravana del gobernador de Virginia Terry McAuliffe.
Los funerales de los dos oficiales de policía, el patrullero Berke M.M. Bates, piloto de la nave y el teniente H. Jay Cullen, tendrán lugar el viernes y el sábado, respectivamente.