Estados Unidos expresó su preocupación por la violencia contra manifestantes en Nicaragua que ha dejado nuevas víctimas esta semana, y pidió al gobierno de Daniel Ortega crear condiciones para un diálogo.
"Estados Unidos sigue profundamente preocupado por la contínua crisis en Nicaragua, y condena la violencia nocturna que dejó al menos dos manifestantes estudiantiles muertos y muchos más heridos", dice el viernes un comunicado del Departamento de Estado.
La nota, firmada por la vocera del Departamento de Estado, Heather Nauert, pide llevar ante la justicia a los responsables de homicidios y otros abusos y violaciones de los derechos humanos, y llama al gobierno nicaragüense "a respetar los derechos de los manifestantes y crear las condiciones necesarias para un diálogo creíble, incluido el cese de toda violencia".
También insta al gobierno de Nicaragua a permitir que las organizaciones independientes de derechos humanos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, evalúen la situación de los derechos humanos en Nicaragua.
El comunicado reitera el firme apoyo de EE.UU. al pueblo nicaragüense y "a sus demandas de democracia genuina".
Tres hombres perdieron la vida el jueves en medio de una represión gubernamental contra estudiantes atrincherados en universidades en Managua.
La agencia de noticias AP reporta que estudiantes dijeron a medios locales que las víctimas fueron disparadas por la policía y partidarios del gobierno que tratan de poner fin a semanas de protestas.
