Estados Unidos decidió suspender la ayuda no letal a los rebeldes sirios luego de que milicianos musulmanes se apoderaran de las bodegas usadas por los grupos apoyados por Occidente.
No obststante, la Casa Blanca y el Departamento de Estado enfatizaron que la ayuda humanitaria a los opositores al régimen de Bashar al-Assad continuará normalmente.
Combatientes del Frente Islámico, que aglutina a seis brigadas de rebeldes, se tomaron las bases y las armas de unas bodegas del Ejército Libre Sirio (ELS) en un punto fronterizo entre Siria y Turquía.
Independientemente del ELS, el frente busca establecer un estado islámico en Siria.
Un vocero estadounidense dijo que Washington está preocupado por los reportes y todavía “intenta obtener los detalles y está en consulta con el General Idriss” y otros miembros del Consejo Militar Supremo rebelde para “inventariar el equipo y las provisiones estadounidenses”.
El senador republicano John McCain manifestó su preocupación por la suspensión y dijo a la Voz de América que la captura de las bodegas por parte de al-Nusra y otros grupos islámicos extremistas es el resultado “directo de nuestro fracaso en ayudar a los moderados, el Ejército Libre Sirio, dirigido por el General Idriss”.
McCain añadió que la asistencia externa de Hezbolá, Rusia e Irán ha permitido que Assad retome el impulso en su lucha contra las fuerzas rebeldes.
No obststante, la Casa Blanca y el Departamento de Estado enfatizaron que la ayuda humanitaria a los opositores al régimen de Bashar al-Assad continuará normalmente.
Combatientes del Frente Islámico, que aglutina a seis brigadas de rebeldes, se tomaron las bases y las armas de unas bodegas del Ejército Libre Sirio (ELS) en un punto fronterizo entre Siria y Turquía.
Independientemente del ELS, el frente busca establecer un estado islámico en Siria.
Un vocero estadounidense dijo que Washington está preocupado por los reportes y todavía “intenta obtener los detalles y está en consulta con el General Idriss” y otros miembros del Consejo Militar Supremo rebelde para “inventariar el equipo y las provisiones estadounidenses”.
El senador republicano John McCain manifestó su preocupación por la suspensión y dijo a la Voz de América que la captura de las bodegas por parte de al-Nusra y otros grupos islámicos extremistas es el resultado “directo de nuestro fracaso en ayudar a los moderados, el Ejército Libre Sirio, dirigido por el General Idriss”.
McCain añadió que la asistencia externa de Hezbolá, Rusia e Irán ha permitido que Assad retome el impulso en su lucha contra las fuerzas rebeldes.