Profundas reformas policiales han estado en el centro de un debate en Estados Unidos desde la muerte en mayo de 2020 de George Floyd bajo custodia de la policía en Mineápolis, Minnesota. Pero los votantes de esa ciudad rechazaron el martes reducir fondos al cuerpo policial y reemplazarlo por un Departamento de Seguridad Pública.
En la primera elección municipal desde la muerte de Floyd, los electores votaron en contra del proyecto por un proyectado margen de 56% a 44%. La pregunta incluida en el referendo era percibida como un indicador del respaldo público al llamado movimiento “desfinanciar a la policía”.
“El movimiento desfinanciar a la policía ha sido rechazado rotundamente”, dijo Richard Aborn, presidente de la Comisión de Ciudadanos y el Crimen de Nueva York, una organización no partidista que trabaja para mejorar la seguridad pública por medio de la innovación.
“Yo creo que se está descubriendo que desfinanciar a la policía no es una idea que la gente vaya a aceptar”, agregó.
Los críticos de la policía de Mineápolis insisten en que el Departamento tiene un largo historial de desconfianza, abusos y prácticas discriminatorias.
“Esta votación significa mantener las cosas como están… una ciudad que sigue delegando”, señaló JaNaé Bates, una organizadora y portavoz de la iniciativa, a CNN. Ella dijo que su grupo continuará presionando por reformas en el departamento de policía.
En juego estaba hasta qué punto enmendar la Carta de la ciudad de Mineápolis para reemplazar al Departamento de Policía con un Departamento de Seguridad Pública que habría cambiado de tono el trabajo policial, incorporando trabajadores sociales y asesores de prevención de violencia en situaciones de emergencia.
“Los residentes de la ciudad decidieron que querían mantener su Departamento de Policía. Ahora empieza el trabajo verdadero”, dijo Cedric Alexander, un exjefe de policía y director de seguridad pública en el condado de Dekalb, en Georgia, a la Voz de América.
En su opinión, “hay que tener una buena vigilancia policial, hay que tener una buena policía y tiene que ser transparente, bien reclutada, entrenada y supervisada”.
Las demandas para reducir recursos a los departamentos de policía chocaron con titulares de un aumento de los homicidios de hasta un 30% en Estados Unidos entre 2019 y 2020, según estadísticas federales. Este año podría eclipsar el estimado de 2020 de más de 21.500 asesinatos.
“La gente ha comprendido que aunque Estados Unidos definitivamente necesita una reforma policial, no podemos eliminar a la policía. Se trata de una aspiración magnífica, pero eso no va a suceder”, dijo Aborn.
“Al final del día, la gente quiere saber si la policía estará allí afuera patrullando, manteniendo la seguridad pública y arrestando a quienes cometen crímenes violentos”, agregó.
[Con información de Chris Simkins, VOA]
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