El déficit presupuestal del gobierno de EE.UU. creció en junio casi $60.000 millones de dólares con lo que mantiene la proyección de que superará el billón de dólares por cuarto año consecutivo.
El Departamento del Tesoro reportó el jueves que durante los nueve primeros meses del año, el déficit totalizó $904.200 millones de dólares.
Según expertos, los republicanos podrían beneficiarse del hecho de que el presidente Barack Obama virtualmente llegará a las elecciones de noviembre con déficits que durante todo su mandato han excedido anualmente el billón de dólares.
Obama y los legisladores republicanos están enfrentados acerca de cómo solucionar el déficit fiscal, y a menos que logren ponerse de acuerdo el próximo año el país podría ver aumentos tributarios y grandes recortes de gastos.
De acuerdo con economistas tal eventualidad podría reducir drásticamente el ya débil crecimiento económico del país e incluso provocar otra recesión.
La Oficina de Presupuesto del Congreso ha pronosticado que el déficit para este año fiscal, que concluye el 30 de septiembre próximo, ascenderá a $ 1 billón 170 mil millones de dólares.
De ser así, sería un año liegarmente mejor que el pasado, cuando el déficit totalizó $1 billón 300 mil millones de dólares, anque de todas maneras superior a los registrados antes de la presidencia de Obama.
El presidente sometió al Congreso en febrero un proyecto de presupuesto en busca de reducir en $4 billones el déficit durante la próxima década, a partir de una combinación de rebajas de gastos y subidas de impuestos.
Una parte importante de su propuesta consiste en no extender las exenciones tributarias en vigor hasta ahora para las parejas con ingresos anuales superiores a los $250.000 dólares, y sí hacerlo para las que ganen menos de esa cantidad.
Obama también propuso fijar una tasa impositiva de 30 por ciento a los estadounidenses que ganen más de un millón de dólares al año. Pero los republicanos han rechazado cualquier aumento de impuestos bajo el argumento de que eso frenaría más la economía.
El Departamento del Tesoro reportó el jueves que durante los nueve primeros meses del año, el déficit totalizó $904.200 millones de dólares.
Según expertos, los republicanos podrían beneficiarse del hecho de que el presidente Barack Obama virtualmente llegará a las elecciones de noviembre con déficits que durante todo su mandato han excedido anualmente el billón de dólares.
Obama y los legisladores republicanos están enfrentados acerca de cómo solucionar el déficit fiscal, y a menos que logren ponerse de acuerdo el próximo año el país podría ver aumentos tributarios y grandes recortes de gastos.
De acuerdo con economistas tal eventualidad podría reducir drásticamente el ya débil crecimiento económico del país e incluso provocar otra recesión.
La Oficina de Presupuesto del Congreso ha pronosticado que el déficit para este año fiscal, que concluye el 30 de septiembre próximo, ascenderá a $ 1 billón 170 mil millones de dólares.
De ser así, sería un año liegarmente mejor que el pasado, cuando el déficit totalizó $1 billón 300 mil millones de dólares, anque de todas maneras superior a los registrados antes de la presidencia de Obama.
El presidente sometió al Congreso en febrero un proyecto de presupuesto en busca de reducir en $4 billones el déficit durante la próxima década, a partir de una combinación de rebajas de gastos y subidas de impuestos.
Una parte importante de su propuesta consiste en no extender las exenciones tributarias en vigor hasta ahora para las parejas con ingresos anuales superiores a los $250.000 dólares, y sí hacerlo para las que ganen menos de esa cantidad.
Obama también propuso fijar una tasa impositiva de 30 por ciento a los estadounidenses que ganen más de un millón de dólares al año. Pero los republicanos han rechazado cualquier aumento de impuestos bajo el argumento de que eso frenaría más la economía.