En su última rueda de prensa matutina como presidente de México, Andrés Manuel López Obrador sorteó el lunes su reloj entre los periodistas asistentes, en el tipo de maniobra popular que llegó a definir su presidencia.
Su sucesora y protegida, Claudia Sheinbaum, que tomará posesión del cargo el martes, ha prometido continuar con la ya icónica conferencia de prensa diaria, conocida como la "mañanera", a pesar de tener un estilo muy diferente, más ensayado.
"No vamos a tener tiempo para preguntas y respuestas..., pero sí vamos a tener tiempo para lo que les ofrecí... porque vamos a rifar el reloj", dijo López Obrador mientras sacaba el objeto que, según ha dicho, vale entre 2,000 y 2,500 pesos (entre 100 y 125 dólares). Los medios locales informaron que la marca es Momentum.
Los relojes de los presidentes y ministros han sido motivo de controversia en otras ocasiones en América Latina, donde varios dirigentes se han visto envueltos en líos por lucir accesorios caros que parecen alejados de sus ideales políticos.
Por ejemplo, la presidenta peruana, Dina Boluarte, se enfrentó a principios de este año a peticiones de dimisión en medio de preguntas sobre la procedencia de su colección de relojes Rolex, mientras que el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, también ha sido criticado por poseer supuestamente relojes de lujo.
El cubano Fidel Castro era famoso por llevar dos relojes Rolex en la misma muñeca, uno -según la leyenda- con la hora local y otro con la de Moscú.
El propio AMLO, como alcalde de Ciudad de México en 2005, fue criticado por los periodistas por usar un costoso reloj Tiffany.
Pero desde que ganó la presidencia en 2018 ha tenido cuidado de mantener una imagen coherente con su partido Morena, que apela a los más pobres de México y promete acabar con la corrupción entre la élite política.
Para la rifa, sus ayudantes colocaron una mesa y López Obrador seleccionó a un periodista para que extrajera un papel al azar con un nombre de un bombo estilo bingo.
El ganador fue un reportero del medio local de videos Sin Puntos Ni Comas, que se unió al mandatario en el escenario y lo abrazó cariñosamente antes de posar para las fotos con el reloj.
La mañanera se cerró con el estreno de un video musical en homenaje al gobernante, protagonizado por su esposa, así como con música en directo y un espectáculo de danza tradicional, mientras un emocionado AMLO se unía en el escenario a los miembros de su gabinete.
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