El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, decretó este miércoles cuarentena de 30 días en todo el país, como medida de prevención por la pandemia del coronavirus COVID-19 y el incremento de casos en la región centroamericana.
Bukele sostuvo que no es una decisión que han tomado a la ligera, junto al gabinete de gobierno.
“Se ha evaluado el impacto económico que esto va a tener, pero el impacto económico palidece a la par de la cantidad de muertes que pudiéramos tener y de enfermos (...) con una pandemia que ni Italia, ni Corea del Sur están preparados para detenerla, ni Alemania... Mucho menos El Salvador o cualquier país de la región”, agregó el mandatario.
Además, Bukele ordenó la prohibición de entrada al país de cualquier extranjero, a excepción de residentes nacionales o el cuerpo diplomático.
Los salvadoreños que quieran ingresen al país deberán someterse a las pruebas correspondientes para garantizar su entrada al territorio, las que determinarán si se someterán a cuarentena de 30 días o un periodo menor.
El Ministerio de Educación suspenderá las clases a nivel público y privado por un periodo de 21 días. Bukele señaló que todas las instituciones educativas deben acatar esta disposición que entra en vigor a partir de este miércoles.
“A fin de proteger la salud de nuestros estudiantes deberá decretar la suspensión de actividades educativas”, detalló el mandatario salvadoreño.
A pesar de la cuarentena, las actividades comerciales no se detendrán, los empresarios seguirán importando y exportando productos, “bajo el debido control sanitario en aquellos rubros que lo requieran”, y así tratar de mantener un equilibrio económico, los salvadoreños continuarán realizando sus labores diarias y asistiendo a sus trabajos con normalidad, acatando las medidas de prevención impulsadas por el Ejecutivo.
Bukele agregó que se harán inspecciones constantes a los precios de los alimentos, medicamentos y suministros para evitar el incremento de los precios durante el periodo de la cuarentena.
También se prohíben las aglomeraciones superiores a 500 personas, conciertos, partidos de fútbol, y cualquier otra actividad que ponga en riesgo el contagio de la población.
El presidente fue enfático en aclarar que hasta el momento en El Salvador no se reportan casos sospechosos o confirmados por Covid-19, y señaló que cuando se identifique alguno, el gobierno informará inmediatamente y aplicará los protocolos sanitarios respectivos a la emergencia.