En Irán se realizan las elecciones parlamentarias que parecen ser una prueba de poder entre los conservadores que apoyan al presidente Mahmoud Ahmadinejad y los que se oponen al mandatario.
Los medios de prensa oficiales de Irán señalan que la asistencia a la urnas "ha sido masiva", para votar en las elecciones parammentarias, que probablemente consolidarán el control del líder supremo, el Ayatollah Ali Khamenei, en relación a los rivales conservadores vinculados al presidente Mahmoud Ahmadinejad.
La semi oficial agencia de noticias Fars informa que el ministerio del interior decidió mantener abiertos los centros de votación por otras dos horas.
Pocos iraníes reformistas están entre los 3.400 candidatos que buscan ocupar escaños en el parlamento de 290 miembros.
La mayoría de la oposición y los grupos reformistas boicotearon la elección de este viernes, la primera desde las cuestionadas elecciones de 2009.
El gobierno conservador de Irán y los líderes religiosos han aplicado una política de persecución contra el movimiento reformista desde que éste llevó a cabo una masiva protesta contra la reelección de Ahmadinejad en 2009.
Más de 48 millones de iraníes están habilitados para votar en los comicios de este viernes 2 de marzo.
El líder supremo, ayatolá Alí Khamenei ha convocado a la población a votar diciendo que hacerlo representará un acto de desafío hacia los enemigos de Irán, en referencia a las potencias occidentales que llevan a cabo una campaña de sanciones contra la economía iraní.
