La selva del Darién, una de las rutas migratorias más peligrosas de América Latina, ha registrado un aumento significativo en el número de familias que la usan para buscar llegar a Estados Unidos. El fenómeno se da inclusive en medio de la pandemia de coronavirus, situación que pone en peligro a miles de menores, según UNICEF. Celia Mendoza, de la Voz de América, informa.