En uno de los casos más grandes de corrupción pública en Colombia, la fiscalía dio un ultimátum al grupo Nule.
El consorcio, un conglomerado de más de 30 empresas, es parte de los diez poderosos grupos comerciales que reciben concesiones de construcción pública en Colombia. O al menos así era hasta que se desató el escándalo por mal uso del dinero de los contribuyentes.
La controversia del grupo Nule, conformado por Guido Nule y sus primos, los hermanos Miguel y Manuel Nule, se inició cuando se dio a conocer la actividad financiera de la corporación durante los últimos cuatro años.
La fiscal general de Colombia, Viviane Morales, advirtió y alertó a los Nule, durante una entrevista a la prensa local.
“No habrá principio de oportunidad total en este caso. Quiero ser clara en este tema: es una propuesta que no es aceptable para la fiscalía”, dijo la funcionaria.
El principio de oportunidad, o perdón de los delitos cometidos, a cambio de colaboración no será una opción para los empresarios.
Alerta internacional
La fiscalía colombiana también alertó a las autoridades internacionales, incluyendo la Policía Internacional, la Interpol, esto con fin de poder capturar a los empresarios en algunos de sus principales centros de operaciones: Miami, Italia y Panamá.
A su vez, las autoridades colombianas incluyeron a otros miembros de la familia que tiene fuertes lazos políticos y empresariales en Colombia.
Mauricio Galofre, cuñado de Miguel Nule, el ex representante de Transvial, Rafael Hernández y el contratista Alberto Calderón, también serán acusados por la Fiscalía.