La Audiencia Nacional de España dio el lunes las razones por las que había acordado extraditar a Estados Unidos al exjefe de inteligencia militar de Venezuela Hugo Carvajal.
La audiencia accedió a la entrega a EE.UU. del exgeneral venezolano al considerar acreditada una conducta continuada y organizada vinculada al narcotráfico durante 20 años, la venta de armas a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a cambio de drogas y la protección armada a los cargamentos de cocaína.
Carvajal, aliado del fallecido líder socialista Hugo Chávez, está reclamado por Estados Unidos por cargos de narcotráfico. Sin embargo, días después de conocerse que la audiencia había dado luz verde a la extradición, la policía española le perdió la pista a Carvajal y su paradero es, hasta ahora, desconocido.
El general en retiro fue arrestado por la policía española en abril a solicitud de las autoridades estadounidenses, pero el Tribunal Superior de España dictaminó en septiembre que debía ser liberado y su solicitud de extradición denegada.
Carvajal, que dirigió la inteligencia militar entre 2004 y 2011, ha negado las acusaciones de haber colaborado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La guerrilla firmó un controvertido acuerdo de paz en 2016 con el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por su sigla en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos había dicho con anterioridad que la asistencia de Carvajal a las FARC incluyó la protección de cargamentos contra su incautación y el suministro de armas y documentos de identificación del gobierno venezolano.
