Los dolientes llegaron el jueves al primer funeral de las víctimas del tiroteo en una iglesia histórica negra en Charleston, Carolina del Sur, un día después de que los feligreses reanudaran los estudios de la Biblia en el sótano donde ocurrió el ataque de hace una semana.
Horas antes de que el cuerpo del pastor Clementa Pinckney regresara a la Iglesia Episcopal Metodista Africana Emanuel para su velorio, miembros de la comunidad y ajenos llenaron la sala donde el atacante comenzó a disparar contra el grupo de estudio de la Biblia. Las autoridades investigan el hecho como un crimen de odio.
"Por nuestra fe, una vez más nos presentamos para declarar que Jesús vive y porque vive, podemos enfrentar el mañana", dijo el pastor provisional Norvel Goff ante una congregación multirracial.
El presidente Barack Obama pronunciará el panegírico en el funeral de Pinckney el viernes.
El ministro, de 41 años, fue el segundo afroestadounidense desde finales de 1800 en reposar en la rotonda del Congreso estatal, donde trabajó casi 20 años, incluyendo su tiempo como senador. Las autoridades dicen que su ataúd fue visitado por unas 4.000 personas.
Dylann Storm Roof, quien es blanco, fue capturado un día después de la matanza, cuando un conductor vio la placa de su vehículo con la bandera de la Confederación, los estados secesionistas durante la Guerra Civil. Imágenes en una página de internet con el nombre de Roof creada meses antes de los ataques lo muestran posando con la bandera confederada y profanando la bandera estadounidense.