La economía de Estados Unidos tuvo un comienzo mediocre durante los primeros tres meses de 2017, aunque tuvo más impulso de lo que indicaban estimaciones anteriores.
El Departamento de Comercio informó el jueves que el Producto Interno Bruto, la medida más amplia de salud económica, creció a una tasa anual de 1,4% en el primer trimestre, más que la estimación anterior de 1,2% y el doble de la proyección inicial de 0,7 %.
La actualización refleja una nueva fortaleza en el gasto del consumidor y las exportaciones.
El resultado es más débil que el crecimiento del 2,1% en el cuarto trimestre de 2016 y coincide con la tasa de crecimiento registrada en el segundo trimestre del año pasado.
Todavía está muy por debajo de los ambiciosos objetivos de crecimiento del presidente Donald Trump de la economía creciendo a más del 3%.
Los analistas esperan que el crecimiento se acelere en el segundo trimestre, impulsado por una sólida contratación y un repunte en el gasto de los consumidores.
Las estimaciones de la Reserva Federal de Atlanta esperan que la economía se expanda a un ritmo anual de 2,9% de abril-junio.
Durante el primer trimestre del año, el gasto del consumidor creció a un ritmo más rápido de lo estimado. El gasto en vivienda, atención médica y servicios financieros, incluidos los seguros, aumentó mucho más en la tercera proyección que en el cálculo anterior.
El gasto del consumidor representa aproximadamente el 70% de la actividad económica. Las exportaciones de productos estadounidenses también mejoraron más de lo que se informó anteriormente, lo cual contribuyó al ligeramente más rápido crecimiento.