El departamento de Trabajo de Estados Unidos informó que el marcado incremento en el precio de los combustibles impulsó los precios al consumidor en el país en el mes de febrero al nivel más alto en los últimos diez meses.
Sin embargo, el incremento no parece significar que las presiones de inflación subyacente se estén acumulando.
Con los precios de la gasolina aumentado casi a diario en Estados Unidos en las últimas semanas, las autoridades dijeron este viernes 16 de marzo de 2012 que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó un 0,4% en el recién concluido mes de febrero, tras el avance de 0,2% en enero pasado.
La gran mayoría del aumento de la inflación fue resultado del salto de un 6% de aumento en el precio de la gasolina que los conductores pagaron en febrero.
La gasolina en Estados Unidos aumentó a más de $1 dólar por litro. El precio actual es el más alto de siempre para esta época del año en el país, a pesar de que todavía es más bajo que en muchos otros países.
El precio del petróleo en los mercados mundiales ha estado en un aumento continuado en los últimos meses, impulsado sobre todo por las tensiones entre las potencias de occidente e Irán, debido al conflicto por su programa nuclear.
En Estados Unidos el costo del petróleo se refleja en un 75% del precio de la gasolina que los conductores pagan en las estaciones de servicio.
El gobierno informó también que si no fuera por el incremento en la gasolina, la presión inflacionaria se habría prácticamente incambiada, y que los precios de los alimentos se han mantenido incambiados por primera vez en 19 meses.
La Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, el banco central del país, informó a comienzos de la semana, que esperaba que los altos precios de los combustibles solamente afectaran la inflación de manera temporal. En el mediano plazo, la inflación se ubicaría en o por debajo de la meta del 2%, estima la FED.
