Un grupo armado que ocupa un centro federal de vida silvestre en el noroccidental estado de Oregon desde el sábado dice que planea permanecer en el edificio indefinidamente.
Los líderes del grupo quieren la liberación de dos rancheros sentenciados a tiempo adicional en prisión por iniciar incendios en tierras federales. También exigen la devolución de una tierra que dicen el gobierno federal le expropió a los rancheros.
Dwight Hammond y su hijo Steven admitieron haber iniciado los incendios, pero dijeron que estaban tratando de eliminar malezas en su propiedad y que las llamas se extendieron accidentalmente a las tierras federales. Cada uno de ellos ha cumplido varios meses de prisión por los incendios, pero un juez les ordenó regresar a prisión por hasta cuatro años alegando que las sentencias originales fueron insuficientes bajo las leyes federales.
Los Hammonds se entregaron el lunes sin incidentes, pero la sentencia ha generado enojo entre los rancheros y granjeros en el oeste de Estados Unidos quienes creen que el gobierno está tomando demasiada tierra, socavando la subsistencia de personas que dependen de ella.
“Hemos tratado y tratado y tratado los métodos prudentes para que el gobierno por lo menos mire esto y diga, eh, hay algo equivocado aquí”, dijo Ammon Bundy, un ranchero enfadado por la situación.
Los residentes locales apoyan la causa de los rancheros, pero objetan la intervención armada.
Brian Bowman, pastor de la Iglesia de Nazareno, apuntó que “hay canales apropiados a seguir y presentar la visión de una milicia, decir que nos vamos a levantar en armas si no logramos lo que queremos, vamos a usar la resistencia armada, eso no es correcto”.
El FBI está tratando de resolver pacíficamente la situación, pero las autoridades locales han cerrado las escuelas cercanas como precaución.